El joven pasó a disposición judicial el miércoles. | Alejandro Sepúlveda

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Tenía fijación por los botes de propinas de las peluquerías. La táctica siempre era la misma. Pedía cita para su hermana y aprovechaba el descuido de la peluquera para llevarse el bote. El joven, de 19 años y origen magrebí, fue detenido a principios de esta semana por cometer, al menos, seis hurtos.

El primero sucedió el pasado 31 de enero en un bar de la plaza del Mercat (Palma). El chico preguntó a la camarera por el baño. A los 20 minutos, la mujer descubrió que le faltaban 450 euros de la cartera. Las cámaras grabaron al presunto ladrón cuando entró a la cocina del local, cogió el bolso y fue al baño. El 8 de febrero acudió a una peluquería de Palma. Distrajo a una trabajadora y se llevó alrededor de 500 euros en propinas. Las cámaras de la peluquería lo grabaron. La propietaria del local, tras visionar las imágenes, reconoció al autor. Era un joven que en un par de ocasiones, hace alrededor de un año, ya intentó sustraer el bote.

El siguiente hurto fue el 13 de febrero. Se hizo con una hucha tras pedir una cita previa para una hermana. El sospechoso también robó en un bar de Plaza Madrid y en otras dos peluquerías. El 19 de febrero accedió a un salón de belleza del Camí Son Cladera. Solicitó cita para su hermana y la peluquera le pidió que esperara sentado. El joven cogió un bolso de una clienta que acababa de llegar al establecimiento y se marchó. En el interior había una cartera con 1.400 euros. El chico, asistido por el abogado Breogán Gómez, pasó a disposición judicial el miércoles y quedó libre.