Ana Julia Quezada (de rojo), la autora confesa de la muerte de Gabriel Cruz, el hijo de su pareja, volvió este martes a la finca para la reconstrucción de los hechos. Este miércoles prestará declaración ante el juez. | Efe - Ricardo García

TW
2

Una quincena de personas se ha concentrado ante la entrada de los aparcamientos de la Ciudad de la Justicia de Almería con carteles y al grito de «asesina, criminal» contra Ana Julia Quezada, la autora confesa de la muerte del niño Gabriel Cruz.

Sobre las 11:00 horas este grupo de personas se ha presentado ante las dependencias judiciales en las que se encuentra Quezada desde las 07:00 horas a la espera de declarar ante el titular del Juzgado de Instrucción número 5, Rafael Soriano, por estos hechos.

Mientras, la expectación en la entrada principal del edificio es muy alta, con un gran número de medios de comunicación, que esperan que los letrados de la mujer, Esteban Hernández Thiel y Beatriz Gámez, ofrezcan nuevos datos sobre su patrocinada.

Noticias relacionadas

Ana Julia Quezada declarará ante Soriano tras haber reconocido que golpeó al niño con la parte roma de un hacha y que luego lo asfixió.La detenida ha llegado a la Ciudad de la Justicia en un furgón de la Guardia Civil tras haber abandonado minutos antes la Comandancia de Almería, en cuyos calabozos ha permanecido desde que fue detenida el pasado domingo en la localidad almeriense de Vícar tras ser sorprendida con el cadáver de Gabriel en el maletero de su coche.

Rafael Soriano dirige la instrucción de la causa judicial iniciada tras la desaparición de Gabriel el pasado 27 de febrero en Las Hortichuelas de Níjar (Almería).

El cuerpo sin vida del niño permaneció en un pozo en la finca de Rodalquilar de la pareja sentimental de Quezada, el padre del menor, hasta que la mujer lo extrajo de allí este domingo y lo trasladó a Vícar, donde fue detenida.
La arrestada confesó ayer a la Guardia Civil que golpeó al niño con la parte roma de un hacha y que luego lo asfixió tras declarar durante casi dos horas ante los agentes de la investigación, a quienes también les dijo que había cometido el crimen ella sola.

Fue entonces cuando declaró que durante una discusión con el pequeño el mismo día de su desaparición, Gabriel la agredió y ella respondió con un fuerte golpe con la parte roma de un hacha. La autopsia muestra signos de que el pequeño murió por estrangulamiento.