La Guardia Civil inspeccionó la vivienda y encontró la litera cerrada. | Alejandro Sepúlveda

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La Fiscalía reclama una condena de tres años de cárcel para el padrastro de tres hijos por un delito de maltrato habitual hacia los menores. La madre también se sienta en el banquillo acusada de permitir castigos a los niños que incluían encerrar a una menor de nueve años en una jaula cuando se portaba mal. El ministerio público reclama para ella un año y medio de cárcel por unos hechos que fueron detectados por el centro escolar al que iban en Calvià y por el Consell de Mallorca.

Los dos acusados comparecieron esta semana en un juzgado de lo Penal de Palma y ambos niegan los hechos. La madre, eso sí, afirmó estar arrepentida por lo ocurrido, si bien insiste que desconocía la situación y que no fue advertida, algo que los menores han negado en distintas fases del proceso.

La situación arranca cuando la mujer llega con sus tres hijos a Mallorca hace tres años. Con ella llega un aviso de Cruz Roja Internacional porque ya en Alemania estaba bajo la lupa de los servicios sociales por la situación de un cuarto hijo, mayor que los otros tres, que tienen 14, 9 y 7 años. La situación de estos menores ha desencadenado dos periodos distintos de tutela por parte del IMAS del Consell. Además de episodios de violencia física, como un puñetazo, una de las niñas denunció en el colegio que, como castigo, la encerraban durante mucho tiempo en un sitio oscuro y pequeño. Cuando la Guardia Civil inspeccionó la vivienda descubrió una especie de jaula.