El hombre, J. M. C. G., de 61 años, durante el juicio. | Alejandro Sepúlveda

TW
3

El acusado de matar en Palma a su mujer estrangulándola, después de haberla golpeado repetidas veces, en noviembre de 2016, ha admitido este lunes en el juicio que la golpeó en la frente con una tetera de hierro pero ha dicho que no recuerda nada más de lo ocurrido hasta que despertó en el calabozo de policía.

El hombre, J. M. C. G., de 61 años, profesor de instituto, se enfrenta a una petición de 25 años de prisión por asesinato, tanto por parte de la Fiscalía como de la acusación popular que ejerce la Abogacía de la comunidad autónoma, y de 20 años por parte de la acusación particular que ejercen los hijos de la víctima. «No sé ni cuantas veces la golpee», ha dicho ante el tribunal del jurado en la primera jornada del juicio.

Todas las acusaciones piden además que se le prohíba acercarse a menos de 200 metros de los cinco hijos de la fallecida. Fiscalía y Abogacía balear piden que les indemnice con un total de 600.000 euros, mientras su abogado reclama 400.000.

El suceso ocurrió el 15 de noviembre de 2016, cuatro meses después de que el acusado y la víctima hubieran contraído matrimonio y fue en el domicilio de la mujer en el barrio de Son Cotoner de Palma, donde el acusado presuntamente la golpeó repetidas veces a puñetazos y usando una tetera de hierro forjado, hasta dejarla inconsciente, según el escrito de la Fiscalía.

La dio por muerta, pero ella logró incorporarse y llegar hasta la puerta de la vivienda, donde él la alcanzó de nuevo, la llevó al baño para acabar definitivamente con su vida y la estranguló. La fiscal ha asegurado al inicio del juicio que cree que el acusado cometió los hechos «sabiendo perfectamente lo que se hacía y queriendo hacerlo».