Entrada de la Fiscalía de las Illes Balears. | Ultima Hora

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«Puto gordo, seboso de mierda, voy a cortarte el cuello, voy a aplastarte la cabeza y te voy a matar». Un joven ha sido condenado a un año de cárcel por estas amenazas a un vigilante de seguridad de la Fiscalía de Palma, en 2017. El juez prohíbe al acusado acercarse a menos de 500 metros del denunciante, de su domicilio o de su lugar de trabajo.

La sentencia recoge que el joven, sobre las 9.00 horas del 16 de agosto, accedió a la Fiscalía. El vigilante de seguridad lo expulsó del edificio después de que increpara a la funcionaria que lo atendía.

El acusado empezó a insultar al guardia y le lanzó unos conos que no le alcanzaron. También se acercó a él con una piedra en la mano y le dijo: «Estás muerto, cabrón de mierda, te voy a tirar la piedra sin que te enteres. Sé dónde vives, dónde vive tu mujer. Tu madre es una cerda, te voy a matar». Y así durante media hora.

Dos días después regresó a la Fiscalía y cuando el responsable de seguridad le denegó el acceso insistió en entrar poniéndose delante del vigilante hasta que, al cabo de 15 minutos, abandonó el lugar.

El juez sostiene en el fallo que las expresiones utilizadas por el acusado «sin duda» reflejan la causación de un mal. «El incidente no ha sido puntual, se repitió durante gran parte de una mañana y otro día posterior con acompañamiento de elementos físicos (levantamiento de brazo y piedra, encaramiento con el perjudicado y lanzamiento de conos de tráfico) que otorga a las amenazas seriedad y capacidad suficiente para amedrentar, incluso a un vigilante de seguridad».