Según ha informado la policía local, tres agentes han acudido hacia las 00.30 horas de la noche a este parque barcelonés tras recibir una llamada que alertaba que había seis perros de gran tamaño, sin atar, atacando a algunos ciudadanos.
A su llegada al lugar, los agentes han observado que había una persona muy alterada pidiendo ayuda y otra con una herida sangrante en la pierna. Posteriormente, también han comprobado que había una segunda persona herida por una mordedura de perro en una pierna.
Al acercarse al dueño de los seis perros, los animales han atacado a los agentes, que han intentado protegerse con sus porras, aunque de forma infructuosa, según la Guardia Urbana.
Tres de los perros han logrado rodear a uno de los policías y uno de ellos le ha mordido en una pierna, en un ataque por la espalda.
El agente ha huido corriendo hacia un estanque y los perros le han perseguido, por lo que ha seguido utilizando su porra para defenderse.
Sin embargo, al no poder frenar la agresión de los canes, ha usado su pistola reglamentaria, con la que ha disparado mortalmente a uno de los animales que le atacaban, de raza american stafford shire terrier, considerada potencialmente peligrosa.
La Guardia Urbana ha denunciado al responsable de los perros como supuesto autor de un delito de atentado contra los agentes de la autoridad y por un delito de lesiones por imprudencia grave, así como por infringir varios aspectos de la ordenanza de animales.
El agente herido ha sido trasladado a un centro sanitario para ser atendido de las distintas lesiones sufridas, por las que ha causado baja laboral.
Por su parte, los dos ciudadanos heridos han sido atendidos por los servicios sanitarios y han interpuesto una denuncia por el ataque de los perros.
Los otros cinco perros han sido trasladados a un centro de acogida de animales.
Este incidente se ha producido meses después de que el pasado 18 de diciembre otro agente de la Urbana disparó mortalmente a la perra Sota, que le atacó en la zona de la plaza de España de Barcelona.
La muerte de la perra Sota suscitó la indignación de los animalistas y desató una oleada de protestas y movilizaciones en la capital catalana, que en algún caso se saldaron con incidentes.
El agente investigado por matar a la perra Sota, propiedad de un sintecho, alegó este pasado lunes ante el juez que el animal se abalanzó sobre él, con actitud agresiva, y que le disparó para protegerse porque sintió miedo de que le atacara.
El agente que disparó y su compañero de patrulla están siendo investigados por los delitos de maltrato animal y también de lesiones, dado que el dueño del can mantiene que le golpearon.
13 comentarios
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Como el perro mordió primero al policía entonces no le pasará nada porque con estas leyes, para defenderte, primero has de dejarte atacar y después defenderte. Eso sí, si te matan pues nada, mala suerte. De haberse cargado al perro antes que le mordiese o atacase ahora mismo estarían aquí todos los amantes de los chuchos apestosos linchando y pidiendo la cabeza del policía y por supuesto ya le estarían formando un expediente.
Espero que se le caiga el pelo bien caído al dueño. Quien no sabe tener animales, no debe tenerlos. El agente tardó demasiado en disparar.
Estamos hartos de ver perros sueltos en los parques (en la entrada pone bien claro que tienen que ir atados, id a los que no está prohibido, que también los hay) con los dueños jugando a tirarles la pelotita, mirando el móvil, con el consiguiente riesgo para niños, ancianos, adultos... ¿Dónde está la policía?
Ya está bien de perros sueltos por donde no está permitido, es un peligro para todos, deberían multar más.
muy bien hecho policía
Amo los canes, pero yo mismo sacrificaria mi perra si mordiera una persona.
que comente quien quiera, siempre que sea educado, este es un país libre
Siempre la persona antes que el perro.Y todas las de la ley al propietario.
Muy buena actuación por parte del policia, y en cuanto al dueño de los perros espero que le mentan un buen puro
A este se le van a acabar las ganas de llevar a los perros sueltos. Hay que tener pocas luces. . .