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Al menos 51 niños y tres profesores resultaron heridos el lunes después de que un hombre les rociara con sosa cáustica en un ataque contra una guardería en la provincia china de Yunnan, según han confirmado este martes las autoridades.

La Alcaldía de la localidad de Kaiyuan ha indicado que el hombre, que ha sido detenido, trepó una de las paredes de la guardería y lanzó el producto, altamente corrosivo, sobre los presentes.

Así, ha resaltado que dos de las víctimas se encuentran graves, si bien se cree que su vida no corre peligro, tal y como ha recogido la agencia china de noticias Xinhua.

El sospechoso, de 23 años y cuyo apellido es Kong, fue detenido una hora después del incidente. La Policía ha señalado que perpetró el ataque como «una venganza contra la sociedad».