El juez que instruye la causa en el TSJB dio un plazo de cinco días a las partes para que pidieran prueba. | Alejandro Sepúlveda

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Las acusaciones particulares en la causa en la que están investigados el juez Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán han reclamado al TSJB la declaración de decenas de testigos. Entre ellos se incluye a la antigua concejal de Seguretat, Angélica Pastor; a su jefe de prensa, Robert Pérez Mena y al exdirector de área, Martí Capó, a raíz de la grabación realizada por éstos a periodistas de Ultima Hora. En concreto, la representación de un agente de la Policía Local que estuvo investigado, reclama que se les interrogue para esclarecer qué datos sobre el desarrollo de la causa de corrupción tenía Pastor. Lo que plantea es la existencia de un posible delito de revelación de secretos por parte del juez Penalva o el fiscal Subirán porque en ese momento, la causa estaba bajo secreto y, por tanto, Pastor no tenía acceso a ella.

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El juez que instruye la causaen el TSJB dio un plazo de cinco días a las partes para que pidieran prueba. La mayoría incluyen la testifical de los afectados, de policías locales y de personas que declararon en la instrucción del ‘caso Cursach' y sus derivadas. Varias añaden la petición para que comparezca ‘la madame'.

Los agentes del Grupo de Blanqueo y seis acusaciones particulares coinciden en pedir la declaración como testigo de un periodista supuesto receptor de las revelaciones de secreto que se imputan a Penalva y Subirán. La representación procesal de Bartolomé Cursach reclama que esa comparecencia sea en condición de investigado: «Su declaración ha de versar de elementos de los que pudiera derivarse su responsabilidad penal y debe cubrirse la misma con la mayor protección posible facilitada por el ordenamiento jurídico». La partes también piden acceder a todos los WhatsApps.