El detonante fue en 2004. «Coincidimos en servicio. Yo iba de copiloto y él, en un momento dado, cogió la emisora y espetó, mirándome con sorna: ‘maricón, maricón, maricón'. Me quedé paralizado, hundido y ultrajado. No pude reaccionar. Se enteró todo el cuartel».
El hombre, que sigue en tratamiento psicológico y psiquiátrico, no se veía con fuerzas para ir a trabajar. «A veces, estando de servicio, venía gente para ver quién era ‘el policía maricón'», dijo el agente afectado, que se dio de baja en 2015 por el supuesto acoso.
El acusado manifestó que coincidió como máximo en seis turnos con el perjudicado. «Es una persona que no conozco. Es falso que yo dijera por la emisora ‘maricón'. Esta situación no se la cree nadie, me hubiesen abierto un expediente al momento», aseguró el policía, quien añadió que nunca ha hecho ningún comentario en referencia a la condición sexual de su compañero. Cree que la denuncia se debe a «un fuego cruzado» entre dos testigos y que él es «un daño colateral».
Un policía local de Llucmajor que declaró como testigo también escuchó en zonas comunes comentarios homófobos del enjuiciado. «Pero no puedo decir si lo dijo delante del denunciante», matizó. «El acusado es una persona que habla mucho y tiene un humor que a veces hace gracia y otras no». Otro agente señaló que en los vestuarios escuchaba comentarios homófobos.
El psicólogo que trata al agente supuestamente acosado relató que tiene un trastorno depresivo, baja autoestima y llanto fácil. «No puede volver a trabajar como policía y mucho menos en Llucmajor».
La fiscal, que pide dos años de cárcel, explicó que hay dos informes «escalofriantes» que llegan a la conclusión de que la víctima ha sufrido una serie de trastornos. «Este tipo de conductas no se pueden permitir. Es muy lamentable que una persona que ha preparado unas oposiciones tenga que dejar su trabajo por su condición sexual».
El agente procesado insistió en su inocencia en el turno de la última palabra. «A él le interesaba estar en su casa y cobrar. Yo no sé qué hago aquí, la verdad».
14 comentarios
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Es una pena que estas actitudes no tengan la condena penal de la violencia de género, ya que destruyen la autoestima de una persona.
Se llama proyección y lo sabe cualquier estudiante de 1 de psicologia. El homófobo obsesionado no acepta en otro lo que él puede tener sin ser consciente.Es así de simple y hay evidencia científica. Algunos no lo entenderán pero es así.
Qué tendrá que ver la condición sexual para ejercer un trabajo. Y mucho menos quién es "el gracioso" para juzgar a nadie... Asquito de acosador, cobarde y mentiroso. Y todavía se crece porque el ayuntamiento no le abrió un expediente a tiempo.
Un aplauso por denunciar. Siempre he pensado que los homófobos tienen más de homoxesual reprimidos que otra cosa. Cada uno es como es. Compañero tu no tienes porque deprimirte. El si, pues con lo que hace ya demuestra que tipo de persona es. Superficial, vanidoso, humillado y prepotente. No dejes tu profesión, todos los policías no son iguales. El que lo tiene que dejar es el. Como va a intervenir en según que situaciones con lo prejuicios que es?
No se qui esta diguent sa veritat, però lo que si sé ès que una persona amb "tiene un trastorno depresivo, baja autoestima y llanto fácil" no hauria de ser policia ...
Las minorías mandan las minorías entretienen y a Yo le digo consternada hasta el Gobierno que viene
La condición sexual, es una forma de meterse con alguien. También te pueden llamar gordo, feo, tonto, inútil, incompetente y muchas cosas más en el trabajo o en los estudios. No creo que sea peor cualquiera de sus otras formas de acoso. No digo que haya que ignorar este caso, sino dar relevancia al resto y mostrar que son igualmente actitudes despreciables.
Para dejar tu vida en manos del "compañero" en una situacion limite(atraco armado,secuestro, etc). Mucho respeto no te tiene.
El denunciante busca no trabajar cobrando, lo sabe toda la plantilla de policía de Llucmajor.
Ui ui ui.... lo que le ha dichoooo......