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La Policía Nacional ha detenido a cuatro personas en Alicante por simular el secuestro de un conocido para exigir un rescate con vídeos amenazantes a sus familiares, residentes en Torrelavega (Cantabria) y Argelia, aprovechando que la supuesta víctima estaba ingresada en un hospital con síntomas de coronavirus y sin teléfono móvil.

Los detenidos son tres hombres y una mujer, todos de nacionalidad española y con numerosos antecedentes por delitos contra las personas y la propiedad. Uno de ellos es menor de edad y se hizo pasar por el supuesto secuestrado, y los otros tienen entre 20 y 24 años.

Según relata la Policía en un comunicado, el conocido de los detenidos ingresó en un hospital de Alicante para ser atendido por unas lesiones que presentaba, acompañadas de síntomas compatibles con la COVID-19.

Esta situación fue aprovechada por los arrestados para idear una maniobra de extorsión contra su familia ya que, al no disponer de su móvil durante su ingreso sería más difícil su localización, explica.

Así, el pasado 10 de mayo una persona denunció en la Comisaría de Torrelavega el secuestro de un familiar residente en Alicante y que había recibido varias llamadas de desconocidos exigiendo el pago de 1.500 euros para salvar la vida de esta persona, además de varios vídeos como prueba de vida con secuencias donde se podía ver la situación de cautiverio en la que supuestamente se encontraba la víctima.

De forma paralela, los detenidos se pusieron en contacto con los padres y otro hermano del supuesto secuestrado, que se encontraban en Argelia, exigiéndoles también el pago de un rescate.

Por la gravedad de los hechos, la Policía de Torrelavega y Alicante activaron el protocolo en este tipo de delitos, lograron establecer la identidad de dos de los supuestos secuestradores analizando los audios y los vídeos, y los detuvieron por un presunto delito de extorsión.

Los agentes encontraron diversas conversaciones escritas, realizadas a través de una red social, en la que exigían el pago del rescate y donde se podía localizar el lugar donde se habrían grabado los vídeos amenazadores.