Tras la llamada de los amigos del joven alertando de lo ocurrido, la Policía Nacional y la Local acudieron al lugar del suceso. | M. À. Cañellas

TW
13

El acusado solía pernoctar en una chabola en una zona cercana al hipódromo de Son Pardo, en Palma. La noche del 21 de diciembre de 2017, un grupo de chicos a bordo de un vehículo empezaron a hacer trompos a escasos metros de él. Pidió que pararan, pero no le hicieron caso. Instantes después, lanzó una botella de cristal de un litro al paso del coche y esta impactó en la cara de uno de los chicos. Se la destrozó. Perdió 14 dientes y sufrió varias fracturas en el rostro.

La Fiscalía pide por ello al imputado, de nacionalidad rumana, dos años y cuatro meses de prisión y que indemnice al perjudicado en 45.000 euros. Se le acusa de un delito de lesiones por imprudencia grave. Está previsto que se siente próximamente en el banquillo de los acusados en un juzgado de lo Penal de Palma.

Chabola

Tal y como relata el ministerio público en su escrito de acusación, esa fatídica noche, sobre las 00.00 horas, el perjudicado y tres amigos más se encontraban en un coche por las inmediaciones del hipódromo de Son Pardo haciendo trompos. En esa zona, un varón de origen rumano pernoctaba en una chabola. El ruido del coche le molestaba. Intentó que los chicos cesaran su actitud, pero no lo consiguió. Cansado de ver que continuaban de la misma manera, intentó vengarse. La siguiente ocasión que el vehículo pasó cerca de su chabola, y circulando a 60 km/h, lanzó contra ellos una botella de un litro de cristal, con tanta mala suerte que se coló por la ventana y golpeó en la cara de uno de los jóvenes.

El impacto de la botella en el rostro causó gravísimas lesiones al perjudicado. Perdió 14 dientes y sufrió fracturas repartidas prácticamente por toda la cara. Necesitó pasar por el quirófano y algo más de cinco meses para recuperarse de las lesiones, aunque le han quedado secuelas.

El ministerio fiscal acusa al imputado, con residencia legal en España y que cuenta con antecedentes penales, de un delito de lesiones por imprudencia grave. Solicita para él dos años y cuatro meses de prisión y que indemnice al denunciante en 45.000 euros por la secuelas, las operaciones a las que se ha sometido y los días que tardó en curar las lesiones.

Agentes de la Policía Nacional y Local acudieron al lugar y arrestaron al hombre

Tras el terrible suceso se vivieron momentos de angustia. Los amigos del perjudicado quedaron aterrorizados ante lo que acababa de ocurrir, ya que el joven tenía la cara destrozada después de sufrir el impacto de una botella de vidrio de un litro en la cara. Aún en estado de shock pudieron llamar a los servicios de emergencias para explicarle lo ocurrido. En pocos minutos se presentaron allí una patrulla de la Policía Nacional y de la Policía Local, que arrestaron al indigente, y una UVI móvil, que atendió en el mismo lugar de los hechos al herido para posteriormente trasladarlo un centro hospitalario de la capital balear.