El procesado, este martes, en una sala de la Audiencia de Palma. | Alejandro Sepúlveda

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Un hombre ha aceptado este martes dos años de prisión tras admitir en la Audiencia Provincial que abusó sexualmente de una compañera de un club de rugby. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del 12 de octubre de 2018 y ambos, acusado y víctima, estuvieron de cena y de copas en Gomila junto a más integrantes de la entidad deportiva.

Sobre las 5.00 horas otro compañero llevó a ambos en coche y los dejó cerca de sus respectivas viviendas. En un momento dado cuando la mujer se dirigía a su casa, el imputado se abalanzó sobre ella, le sujetó el cuello y le introdujo una mano por debajo el pantalón, llegándole a meter un dedo en la vagina. La perjudicada le dio un empujón y pudo zafarse de él. Como consecuencia de los hechos, la víctima sufrió varias lesiones.

El procesado se ha declarado culpable de un delito de abuso sexual con penetración vaginal y además de los dos años de prisión, que no cumplirá al quedar la pena suspendida, tendrá que abonar 4.000 euros a la mujer, cantidad que ya ha sido consignada en el juzgado y que le ha servido para que la Fiscalía apreciara el atenuante de reparación del daño.

Las condiciones para que no se ejecute la sentencia, dictada in voce por el juez en la Audiencia de Palma, no podrán volver a delinquir en cinco años y tendrá que someterse a un curso de educación sexual.