Según ha informado Policía Nacional este sábado en nota de prensa, agentes del Cuerpo, en colaboración con la Policía Local de Palma, han procedido a la detención de cuatro personas, tres hombres de 34, 58 y 68 años y una mujer de 29 años, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas, quienes integraban un grupo criminal que sería el principal vendedor de cocaína en el barrio de Virgen de Lluc.
Agentes del Grupo II de Estupefacientes de la Policía Nacional, detectaron hace meses un incremento notable de la venta de cocaína en el barrio palmesano con nexos claros con otro «clan», asentado en Sagunto (Valencia). Este grupo es considerado como el principal suministrador de cocaína a varios clanes de la ciudad de Palma con puntos de venta tanto en Son Banya como en otros barrios de la ciudad.
Los agentes habían desarrollado varias actuaciones en el barrio y contra las personas investigadas, pero al comprobar la reincidencia, así como el incremento del negocio plantearon un operativo para desmantelar el grupo en su totalidad.
Vínculos con otro grupo criminal
Durante la investigación, se detectó un grupo perfectamente organizado: un matrimonio destacado como los líderes y varios sujetos con funciones secundarias. El matrimonio se encargaría de la adquisición e introducción en Mallorca de la droga valiéndose de sus vínculos con otro grupo criminal, siendo las funciones del resto de los sujetos las de logística, venta y distribución de la sustancia.
Las gestiones acumularon indicios contra los presuntos autores y desvelaron detalles precisos sobre el proceder del grupo y sus ubicaciones clave. Entre ellas un punto de venta de cocaína muy activo en el barrio de Virgen de Lluc, con vendedor contratado para las transacciones. Una «caleta» (o zulo) muy próximo al anterior con la misión de ser centro de almacenamiento de la droga para facilitar el abastecimiento continuo.
No obstante, el gran hallazgo se consiguió cuando los policías, tras un seguimiento discreto, localizaron el almacén de los sospechosos y un segundo punto de venta establecido en Porto Pi, en Palma.
Un grupo en auge y con intenciones de extensión en la ciudad
La investigación contaba con todo lo necesario para proceder a su explotación. Tras la comunicación a la Autoridad Judicial y con su autorización se llevaron a cabo tres registros deteniendo a los cuatro integrantes del grupo.
Los registros dieron las pruebas esperadas: miles de euros fraccionados en billetes pequeños, varias balanzas de precisión, un datáfono para transacciones sin dinero en efectivo y cerca de un kilogramo de cocaína de gran calidad.
La Policía ha considerado que con esta operación ha quedado desarticulado el grupo pudiéndose acreditar la participación de sus miembros y la ilícita actividad durante meses.
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