Bartolomé Cursach fue juzgado, y condenado en 2018 por una escopeta que guardaba en su domicilio. | Alejandro Sepúlveda

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Será el juicio más largo jamás celebrado en Baleares, uno de los más tensos y el más abierto a sorpresas. La Audiencia Provincial puesto fecha por fin a la vista del ‘caso Cursach', que tenía pendiente desde hace casi dos años. Las sesiones arrancarán el 13 de junio y se prolongarán hasta el mes de enero de 2023: un total de 89 jornadas. Nóos, hasta ahora el más largo, tuvo 61. El calendario, de momento es provisional y la Audiencia ha dado un plazo de tres días a las partes para que comprueben con sus agendas si tienen alguna causa preferente para esos días. Aguardan 24 acusados, con el empresario Bartolomé Cursach al frente, que afronta una petición de ocho años de cárcel, y más de dos centenares de testigos. El proceso está marcado por un escrito de calificación presentado en diciembre de 2018 poco antes de que el caso saltara por los aires con la detención de los policías que lo investigaron, el descubrimiento del grupo de whatApp entre estos, el juez y el fiscal y la imputación de ambos, Manuel Penalva y Miguel Ángel Subirán, ante el Tribunal Superior de Justicia.

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De hecho, en todo este tiempo, la Fiscalía ha renunciado a algunos de los testigos clave en los que se asentaban acusaciones como las orgías en la discoteca Tito's en las que habrían participado policías locales: Ahora el Ministerio Público acusa a ‘El Ico', la madame y al antiguo recogevasos de la discoteca que fue el testigo protegido 29, de ser unos mentirosos. Otras declaraciones importantes para probar los supuestos sobornos de Cursach a funcionarios están también en el alambre como la de una trabajadora municipal de Palma que declaró en el TSJIB que si dijo que había cobrado fue por presiones y la amenaza de ir a la cárcel. Todo ese giro convierte al juicio del ‘caso Cursach' en algo imprevisible que empezará por una batería de cuestiones previas por parte de las defensas para tratar de invalidar el proceso.

La principal pega será la causa aún abierta en el TSJIB contra el ex juez Manuel Penalva y el exfiscal Miguel Ángel Subirán, aún pendiente de que se resuelvan los recursos planteados por las acusaciones para ampliar los delitos de los que se les acusa. La decisión definitiva está a la espera de una nueva pericial psiquiátrica sobre el estado del exfiscal y su posible afectación cuando estaba al frente del ‘caso Cursach' y firmó el escrito de calificación que da lugar al juicio. A partir de junio esperan curvas.

El apunte

Otros tres juicios derivados del caso están pendientes de celebrarse

El macrojuicio que debe comenzar en junio es solo una de las piezas pendientes de juzgar de todo el caso. Además está el supuesto amaño de unas oposiciones que fue lo que detonó el inicio de todas las investigaciones y otro, muy similar al de Cursach, pero en torno a otro empresario de Platja de Palma, Miquel Pascual. La cuarta es sobre la policía de Calvià y su antiguo jefe.