La Audiencia de Palma es la sede del juicio por corrupción a Bartolomé Cursach y otros 15 acusados que arranca este lunes. El conocido empresario del ocio nocturno en Mallorca se sienta en el banquillo tas nueve años de instrucción.
En esta primera sesión los letrados pretenden ganar por K.O. en las primeras jornadas sin que lleguen a declarar acusados o testigos y dejar pasar las 148 sesiones previstas. El principal motivo para las nulidades tiene que ver con la causa que se sigue en el TSJIB y en el que le principal juez instructor, Manuel Penalva, y el fiscal Miguel Ángel Subirán están procesados por prevaricación y amenazas a testigos. Para las defensas las irregularidades en la instrucción contaminan todo el procedimiento e impiden la celebración de un juicio con garantías para los acusados.
En el arranque del juicio las acusaciones particulares intentan tumbar la rebaja de penas a Cursach por parte de la Fiscalía.
Finaliza aquí la primera sesión del juicio del caso Cursach, que continuará este martes.
El tribunal se retira a deliberar sobre la petición de nulidad de la acusación particular y para aclarar qué acusados podrán marcharse esta misma mañana.
El fiscal Joan Carrau niega que la acusación particular a la que representa Bueyes haya estado indefensa y recuerda que el juez instructor ya la acusó de «fraude procesal».
Teresa Bueyes habla de «irregularidades sospechosas» en el proceso e insinúa que detrás de ellas está Cursach. La magistrada presidenta salta: «No le puedo permitir que atribuya a la administración de justicia actuaciones delictivas. De ser así tendrá que aportar indicios de prueba». Bueyes pide que declare el antiguo juez instructor, Manuel Penalva, como testigo en el juicio. Penalva ha sido procesado en el TSJIB.
La acusación particular que defiende a Magaluf Beach S. A. pide anular todo el caso y devolver entero a instrucción para ampliar los hechos.
La acusación particular que representa a empresarios de Palma también retira la acusación a diez acusados: los mismos a los que exculpó el fiscal y dos más, Joan Mut y Carlos Tomás.
La abogacía de la Comunidad Autónoma abandona el procedimiento. Solo acusaba a Pilar Carbonell y a un funcionario. Su representante ha dicho que no hay posibilidad de acusarles de prevaricación u otros delitos.
La presidenta riñe a los acusados por salir de la sala sin permiso. Cursach se disculpa.
El tribunal solo ha informado de que hay un incidente de recusación contra las magistradas en otro procedimiento y que se ha inadmitido. Ni acusaciones ni defensas ponen pegas a las magistradas que componen el tribunal.
La presidenta del Tribunal, Samantha Romero, informa de un auto de recusación del tribunal en otro proceso del caso, el de las oposiciones.
Los acusados entran en la sala. Estarán todos juntos. Mientras que en otra dependencia está un grupo de 15 abogados.
La Fiscalía centra el juicio en la Policía Local de Palma. Cabe señalar que fue el inicio de la investigación, previa a la irrupción en ella del juez Manuel Penalva.
La abogada Teresa Bueyes asume una de las acusaciones particulares. Es conocida por su intervención en casos de sociedad como el de Rocío Carrasco.
En estos últimos días, el caso ha dado algunos giros. Los fiscales dieron un vuelco a la acusación inicial. Entre otras cuestiones, han rebajado de manera drástica la petición de penas a Cursach, de ocho años y medio, a uno y medio.
Este lunes se sientan en el banquillo 23 acusados por una trama cuya investigación arrancó en 2014. El empresario Bartolomé Cursach aún no ha llegado a la Audiencia. Aguarda en un café cercano la hora de entrada junto a su mujer y sus abogados.
También se encuentran ya en la Audiencia Jaume Lladó, quien fuera director de Titos, y Pilar Carbonell, exdirectora general de Turismo. Llegan con el abogado Miquel Arbona.
Queda media hora para que arranque el juicio. Llega Tolo Sbert, la mano derecha de Cursach. También Maria Ángeles Berrocal, letrada de la comunidad autónoma, así como los abogados Gaspar Oliver, David Salvà y Álvaro Martín Olmos.
Comienzan a llegar los abogados. Los primeros, Pedro Casado y Llorenç Salvà. También Eduardo Morey.
Seguidamente, han entrado los Fiscales Anticorrupción Juan Carrau y Tomás Herranz. Y el abogado Salvador Perera.
La primera sesión del juicio de este caso ha generado gran expectación. Todos los medios de comunicación locales, y también nacionales, se agolpan a las puertas de la Audiencia Provincial a la espera de que lleguen los acusados.
Junto a la Audiencia se celebra también este lunes a primera hora una manifestación convocada por Arran y Alerta Solidària en apoyo a los 12 encausados por el 'caso confeti', quienes desde este lunes serán juzgados como presuntos autores de delito de desordenes públicos.
El juicio del 'caso Cursach' comparte con el 'caso Nóos' a dos de las tres magistradas que formaron Sala en el procedimiento contra la Infanta Cristina y su marido Iñaki Urdangarin. Ambas intentaron abstenerse del juicio tras haber resuelto su sección de la Audiencia, la primera, más de un centenar de recursos relacionados con la trama. Sin embargo, esa petición se desestimó y ahora se encuentran al frente del procedimiento. Este es el tribunal.
Se prevé que el macrojuicio por esta presunta trama corrupta comience este lunes en la Audiencia y que se prolongue durante nueve meses.
En vez de tanta acusación ,merece medallas, es y ha sido un empresario,que ha salido de la nada,fue socio del Bacomo hace muchísimos años y al ver la trayectoria empezó una carrera de éxitos, no quiere decir que los que están a su alrededor no trapicheen , cuando uno no podía comprarse un seiscientos, el ya tenía un mini 1275, para mí mi admiración a su manera de comerciar es un hombre intrépido que ha sabido remar contracorrea
2 comentarios
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TiáSi ara a l'extorsió, la corrupció de policies i funcionaris, etc. li deim un emprenedor intrèpid, llavors hauríem de prohibir el capitalisme
En vez de tanta acusación ,merece medallas, es y ha sido un empresario,que ha salido de la nada,fue socio del Bacomo hace muchísimos años y al ver la trayectoria empezó una carrera de éxitos, no quiere decir que los que están a su alrededor no trapicheen , cuando uno no podía comprarse un seiscientos, el ya tenía un mini 1275, para mí mi admiración a su manera de comerciar es un hombre intrépido que ha sabido remar contracorrea