Antonio Cortés Cortés, en una de las sesiones del juicio con jurado celebrado en la Audiencia.. | Alejandro Sepúlveda

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La Audiencia Provincial de Palma ha condenado a 23 años de cárcel a Antonio Cortés, el asesino confeso de Remedios, su expareja sentimental y prima, el 3 de noviembre de 2020 en el Camí de Ca na Verda, en es Secar de la Real. El fallo es consecuencia del veredicto de culpabilidad emitido por el tribunal del jurado el pasado día 20. La sentencia también contempla que el procesado deberá indemnizar con 100.000 euros a cada uno de los cuatro hijos menores que tenía con la fallecida y con 50.000 a sus exsuegros.

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La Audiencia considera probado que Antonio sobre las 20.45 horas de aquel fatídico día recibió una llamada de Remedios en la que esta le propuso quedar para hablar de temas relacionados con los cuatro hijos que compartían. El acusado fue a buscar a su expareja al domicilio de sus padres. La recogió en su vehículo y se dirigió hacia un descampado ubicado en la zona de Son Rossinyol. Allí empezó una discusión con la víctima. El hombre, de forma repentina, con intención de acabar con la vida de ‘la Reme', empezó a golpearla por todo el cuerpo, llegando incluso a clavarle un destornillador en el tórax. Él pensó que estaba muerta y la introdujo en el maletero y tiró en ese lugar el móvil de la mujer para dificultar su localización, abandonando el polígono con el coche. Cuando Antonio Cortés circulaba por el Camí Ca na Verda, Remedios, a pesar de las lesiones, consiguió salir del portamaletas a través del respaldo del asiento trasero e intentó escapar del coche. En ese momento empezó un forcejeo entre ambos y el acusado perdió el control del coche y colisionó contra unos bloques de cemento. La mujer aprovechó para salir del vehículo y él la persiguió. Cuando le dio alcance y la empujó contra un muro. Después la arrastró por el suelo y acabó golpeándola repetidamente con una piedra en la cabeza hasta matarla. Horas más tarde, Antonio Cortés llamó a la Policía Nacional y confesó que había matado a la que era la madre de sus cuatro hijos.

El tribunal popular apreció las atenuantes de toxifrenia leve y confesión tardía que solicitaba la defensa del procesado, ejercida por Julio Romero. Tanto la Fiscalía como la acusación popular y la particular, esta última en nombre del abogado David Salvà, solicitaban una pena de 23 años para el procesado. La Audiencia de Palma ha impuesto la máxima condena posible al asesino de Remedios Cortés.