Imagen de archivo de la oficina de objetos hallados de la Policía Local de Palma. | M. À. Cañellas -

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El juzgado de Instrucción número 1 de Palma, la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Local de Palma y el Grupo de Investigación Centro de la Policía Nacional, avanzan con paso firme en la investigación contra un policía local de Palma acusado de apropiación indebida.

Ahora, tras meses de pesquisas policiales, se ha descubierto y así ha sido notificado al juez instructor, que dicho agente acudió en repetidas ocasiones a tiendas de segunda mano, compra y venta de metales preciosos y similares, para vender joyas por valor de 8.000 euros. Las piezas fueron depositadas en la oficina de objetos hallados de la Policía Local por ciudadanos de bien tras encontrárselas por la calle o locales públicos.

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Se trata del mismo agente que a mediados de diciembre de 2022, ya fue detenido por la Policía Nacional    por quedarse una cartera perdida con más de 1.000 dólares que entregó una ciudadana. El funcionario está acusado de un presunto delito de apropiación indebida. La investigación se inició con motivo de la actuación de la Unidad de asuntos internos de la Policía Local de Palma, que tuvo conocimiento de una serie de irregularidades en una oficina municipal ‘Objetos perdidos' en la que un agente se habría quedado con una cartera que entregó una ciudadana.

La mujer dejó una cartera con 1.100 dólares y sólo se consignaron cien dólares y diez euros. Ningún agente le hizo entrega de resguardo alguno en ese momento, aunque días más tarde sí que le dieron uno cuando volvió para pedirlo. Uno de los agentes había consignado en el libro de registro tan solo 100 dólares y 10 euros. La Policía Local llevó a cabo una serie de gestiones que evidenciaban la supuesta comisión de un delito de apropiación indebida e inmediatamente informó de lo ocurrido ante la Policía Nacional.

Los investigadores realizaron varias indagaciones para tratar de esclarecer los hechos. Los policías que asumieron el caso, de la comisaría de Distrito Centro, comprobaron que, efectivamente, faltaban 1.000 dólares. Los agentes pusieron en marcha las pesquisas para localizar el dinero que faltaba y comprobaron que un policía local había acudido a cuatro casas de cambio distintas para conseguir euros. El policía había realizado hasta treinta intercambios de monedas de trece países distintos. En un principio, el funcionario quedó en libertad con cargos tras prestar declaración en el juzgado de guardia y fue apartado provisionalmente de sus funciones, a la espera de esclarecer lo ocurrido. La versión de los hechos que ofreció el agente en su día parece ser que era «inverosímil», según fuentes judiciales consultadas por este periódico. En la mochila que encontró una vigilante y dos compañeros había 1.100 dólares y algunos billetes del euros. Cuando la mujer regresó a la oficina porque no le habían dado ningún resguardo de hallazgo solo había 100 dólares y 10 euros. Ahora, se están investigando también a los compañeros y todas las operaciones realizadas.

El apunte

Otro policía local de la misma unidad, imputado

Los agentes del Grupo de Distrito Centro de la Policía Nacional investigan si el agente detenido en Palma se quedó más dinero o efectos de valor de otros hurtos. Pero al margen de eso, el juzgado de Instrucción número 1 de Palma, también procedió a la imputación de un segundo agente, compañero del arrestado, al que acusa de falsedad documental. Todo apunta, a que este funcionario pudo falsificar los libros de registro.