Los dos procesados, ayer, durante la vista celebrada en un Vía Alemania. | J.P.M.

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Mintieron delante de una magistrada a sabiendas de que no podían hacerlo para intentar exculpar a un amigo, al que juzgaban por una presunta agresión sexual cometida en Calvià. Este acabó condenado a dos años de prisión y ambos imputados por un delito de falso testimonio. Este lunes, los dos procesados, reconocieron los hechos ante una jueza distinta -la de Penal 6- y aceptaron sendas penas de seis meses de prisión y multas de 360 euros.

Cuando uno acude como testigo a una vista se le remarca que tiene que decir la verdad y, además, se le insta jurar o prometer decirla. Se le avisa que en caso de no hacerlo se puede acabar sentado en el banquillo de los acusados. Y esto es lo que ha ocurrido. Los dos jóvenes acudieron en marzo de 2021 a testificar en un juicio por una agresión sexual cometida el 15 de diciembre de 2019. El imputado era su amigo y ellos fueron a dar su versión.

La perjudicada explicó ante la jueza que aquella noche, tras encontrarse con el acusado, «iba perjudicada, pero estoy segura que me echaron algo en la bebida. Sólo recuerdo que me fui con él a la habitación y de tener su cara encima mía», dijo. El procesado negó que la joven hubiera subido a su casa. «Le dije que no, que vivía con mis padres y no se podía quedar», subrayó. Dicha versión fue ratificada por los dos testigos propuestos por la defensa, dos amigos del acusado. Meses después se dio a conocer la sentencia , que consideró probado que los cuatro -la perjudicada, el acusado y los dos amigos- entraron en el inmueble, donde el imputado aprovechó que la joven había ingerido gran cantidad de alcohol y estaba casi inconsciente, sin capacidad de reacción ni poder mostrar su oposición y ejercer resistencia física. El procesado besó a la víctima, le hizo un chupetón en el cuello y le tocó los pechos y los genitales.

En el mismo fallo la jueza de lo Penal número 4 acusó a los dos amigos del procesado de mentir en el juicio y ambos quedaron imputados. Hasta ayer. Los dos reconocieron su culpabilidad y aceptaron las penas, a las que se llegó tras un acuerdo de conformidad. La pena de seis meses de prisión quedó suspendida por un plazo de dos años, en el cual no podrán volver a delinquir.