Los hechos se remontan a la franja de tiempo establecida entre noviembre del año 2022 y enero del 2023. En total se trata de unos 272 archivos de contenido pedófilo, sadomasoquista y zoofilia, entre fotografías y videos. Tras solicitar la entrada y registro en el domicilio del objetivo los policías se incautaron en el ordenador de sobremesa y tres discos duros con numerosos archivos. Fuentes policiales informaron este domingo en un comunicado que una sola carpeta de las intervenidas tenía unas 2.900 fotos de contenido sexual con menores. En el análisis de los dispositivos electrónicos se ha encontrado numerosos archivos de temática zoofilia que tenían como protagonistas a niñas de entre los 3 y 6 años. Los agentes tienen constancia de más de 10.000 archivos. Cabe destacar que de los más de 10.000 archivos había unos 800 de extrema dureza, según se desprende de la escala de valoración policial establecida en estos casos.
Una vez detenido, el acusado trató de justificarse diciendo que efectuó la descarga de una película, resultando ser una carpeta conteniendo material de pedofilia. Esta excusa es totalmente inverosímil dado que los historiales de descargas y distribución se produjeron en un amplio periodo de tiempo. Acto seguido, se arrestó al vecino de Palma por un presunto delito de Corrupción de Menores (pornografía infantil), tenencia y distribución, pasándolo a disposición judicial al Juzgado de Instrucción de guardia de Palma, donde se decretó prisión provisional para el mismo.
Esta intervención ha tenido su origen en la solicitud de colaboración policial requerida al Grupo de Delitos Tecnológicos de Palma, por parte de la Unidad Central de Ciberdelincuencia, Grupo III de Protección al Menor, de la Comisaría General de Policía Judicial de Madrid, como consecuencia de la investigación que se viene realizando por ese grupo contra la tenencia y distribución de material de explotación sexual infantil a través de Internet.