Además de la pena privativa de libertad, la acusación pública también que el imputado, que cuenta con medio centenar de antecedentes, la mayoría por robos, indemnice a la empresa pública Emaya en 2.450 euros por los desperfectos ocasionados. El juicio, tras no alcanzarse un acuerdo este jueves, se ha fijado para principios de 2024.
El suceso se remonta a alrededor de la 1 de la madrugada del 23 de febrero de 2021. El acusado se dirigió a unos contenedores de la calle Joan Miró de la capital balear, a la altura del número 21, y lanzó un objeto prendido dentro de uno de los recipientes. En unos pocos minutos los dos depósitos de basura quedaron calcinados. Hasta el lugar se desplazaron rápidamente patrullas de la Policía Nacional y los Bombers de Palma.
Los agentes se entrevistaron con varios vecinos que habían salido a la calle a separar las motos que había cerca del foco del fuego. De entre todas las personas llamó la atención uno. Un viejo conocido de la policía que miraba con atención la actuación de los bomberos. Este hombre les comentó que él había visto al pirómano y también la dirección por dónde había huído. Horas después fue detenido. Una cámara de un establecimiento cercano lo 'cazó' lanzando el objeto encendido a uno de los contenedores.
3 comentarios
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Si nuestra justisiíta,fuera JUSTA,la delincuencia,se lo repensaría,antes de delinquir. Pero,así,como actúa,casi siempre, con ése cuénto,de "libertat,con cargos",(QUE NÚNCA SE APLICAN,ESOS CARGOS),SÉ RIE DE ELLA,toda la delincuencia. Créo qué,TENEMOS DIFÍCIL ARREGLO, por aquí,yá....... españistán.
Pues se lo merece, el problema no es el contenedor vale 600 euros el problema es que el coche que está aparcado al lado si el propietario ha llenado el depósito de gasolina explote y queme la finca sobretodo los primeros pisos.
Pues sí y que se cumplan íntegros a ver si acabamos con esa moda tan peligrosa y que tanto daño causa a las personas afectadas