Uno de los arrestados, era menor y vendía imágenes de contenido sexual de una niña a través de una cuenta en una conocida red social, cobrando por ellas a través de una aplicación. El joven simulaba que tenía acceso directo a la niña, pero en realidad encontraba las fotografías en Internet. El otro detenido en Mallorca, por su parte, intercambiaba instantáneas con un varón localizado en Murcia a través de mensajería privada. Ambos se pasaban los archivos acompañados por mensajes con los que reforzaban su deseo por los niños. El individuo de Murcia llegó a compartir contenido en el que planeaba abusar de su hija de 11 años, enviando incluso una fotografía de la menor desnuda.
Por su parte el detenido de Badajoz había enviado vídeos de contenido sexual a un receptor en Guatemala, que se hacía pasar por un chico de 15 años. En el registro de su domicilio se encontró un ordenador y un móvil con grandes cantidades de archivos de explotación sexual infantil. Por último en Girona los investigadores detectaron a otro varón que había utilizado una red social para enviar este tipo de vídeos. La misma plataforma le eliminó la cuenta y el sospechoso volvió a abrirse una nueva para continuar generando contenido de esta índole. Los agentes, tras registrar su domicilio, encontraron numerosas cantidades de pornografía infantil en su teléfono móvil.
