La acusada, en una sala de lo Penal de Vía Alemania, donde se declaró culpable. | J.P.M.

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Una joven fue condenada este lunes en Palma a tres meses de prisión tras reconocer que en septiembre de 2021 envió fotos sexuales de una examiga a la madre de esta. Asimismo también tendrá que pagar una multa de 90 euros por un delito leve de amenazas a la propia víctima.

La perjudicada, representada por el abogado Pedro Garrido, recibirá 3.000 euros en concepto de responsabilidad civil. La pena de cárcel quedó suspendida siempre y cuando la procesada no delinca en los próximos dos años y abone 2.000 euros esta misma semana y los 1.000 restantes antes de cuatro meses.

Los hechos enjuiciados se remontan al 11 de septiembre de 2021, cuando la procesada envió a través de WhatsApp a la madre de una examiga tres fotos de contenido sexual de la joven. La acusada las había obtenido del perfil privado de Instagram que tenía la perjudicada y al cual solo podían acceder los amigos más próximos. Junto a las imágenes le escribió el siguiente texto: «Aquí están todas las pruebas de a lo que se dedica». Además, ese mismo día, le contó a la mujer que su hija se iba de los sitios sin pagar, que robaba ropa en las tiendas, que vendía marihuana y fumaba porros. Todo ello «para romper la relación maternofilial», al saber la enjuiciada que la madre de su examiga era muy religiosa.

La joven también amenazó a su antigua amiga, ya que un apenas un mes antes, en el mes de agosto, y tras discutir por WhatsApp, le amedrentó con frases como «dios qué paliza te vas a llevar» y «ten mucho cuidado conmigo». La jueza dictó sentencia 'in voce' tras llegar a un acuerdo de conformidad el abogado de la procesada con el abogado de la víctima y la Fiscalía antes de la celebración de la vista.