El cadáver ha sido localizado cerca del poblado gitano de Son Banya.

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El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se ha desplegado esta tarde del martes en los alrededores del poblado gitano de Son Banya, cerca de las cocheras de la EMT, por la aparición de un cadáver en avanzado estado de descomposición. De momento, se desconoce la identidad del fallecido y están buscando si en las proximidades podría haber alguna documentación que acreditara su filiación.

El hallazgo se ha llevado a cabo de forma casual a las cinco de la tarde, cuando una persona se ha topado con unos huesos humanos y ha llamado enseguida a la centralita del 091. Una patrulla se ha personado en el solar y ha confirmado que correspondían a una persona, aunque no está claro si es un hombre o una mujer.

Mañana está previsto que se le practique la autopsia, para tratar de aclarar si alguno de los huesos presentaba fracturas, lo que indicaría una muerte violenta. También se le tomarán muestras de ADN, para identificar los restos. La principal hipótesis es que se trata de un toxicómano que había acudido a Son Banya y pudo sufrir una sobredosis, hace meses o incluso años.

Lo más llamativo es que en todo este tiempo nadie ha dado con el esqueleto. El juzgado de guardia ha sido informado del hallazgo y ha ordenado el levantamiento del cadáver.