Un hombre ha sido condenado a cuatro meses de cárcel por intentar incendiar la casa de su vecina en Palma. El acusado prendió fuego a una esponja que arrojó al interior del domicilio de la mujer, pero no llegó a arder. La jueza, que ha tenido en cuenta la eximente incompleta de trastorno psíquico, prohíbe al enjuiciado comunicarse y aproximarse a menos de 500 metros de la víctima durante los próximos tres años.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 7.00 horas del 29 de noviembre de 2022. El hombre se personó en un piso situado en la calle Cala Serena de Palma donde residía la mujer y tocó el timbre de la casa. La perjudicada, que se encontraba durmiendo, escuchó cómo profería expresiones como «os voy a pegar fuego».
El acusado llevaba un mechero en la mano con el que prendió fuego a una pequeña esponja mientras decía: «Aquí hay un agujero, os voy a pegar fuego». A continuación arrojó el objeto al interior del domicilio a través del orificio sin que finalmente se incendiara la vivienda. Los hechos generaron gran temor y ansiedad a la víctima.
El hombre, tras ser detenido, fue trasladado a la Unidad de Psiquiatría de Son Espases en estado de gran agitación y quedó ingresado. Los médicos le diagnosticaron esquizofrenia paranoide y trastorno por consumo de sustancias. El arrestado fue dado de alta al día siguiente de intentar prender fuego a la casa de su vecina.
El acusado no compareció en el juicio celebrado a finales del pasado mes de enero. La mujer explicó en la vista oral que su vecino le hacía la vida imposible y que incluso se quedaba a dormir en el rellano esperándola. También relató que la amenazaba con quemarle la casa con ella dentro y que el 29 de noviembre de 2022 encendió un folio e intentó pasarlo por debajo de la puerta de su domicilio. Un policía que detuvo al hombre contó que cuando acudieron a la vivienda encontraron un mechero y una esponja chamuscada.
2 comentarios
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Y yo me pregunto,si ya lo han soltado ,es vecino de la víctima y el juez ha ordenado el alejamiento de al menos 500 metros de esta mujer, como lo hacemos?. Supongo que por desgracia la que tendrá que alejarse será la víctima.
Mucha gente suelta en Palma, con serios trastornos psicologicos, creo que ultimamente la poblacion, no se conforma con lo que tiene, y tambien ocurre que en estas islas estabamos acostumbrados a vivir por encima de nuestras posibilidades, en la actualidad vuelve una fuerte crisis, y lo que se avecina sera peor.