También se está a la espera de conocer la decisión de la Fiscalía que podría añadir un delito de odio.
La violencia extrema se apoderó de la Playa de Palma. Hace algo más de una semana, un grupo de vecinos de s'Arenal de Llucmajor propinó una brutal paliza a dos jóvenes argelinos que se encontraban deambulando por la primera línea de la zona. Desde que estalló el conflicto se han ido sucediendo pequeños conatos violentos e incluso algunos residentes se han dedicado a ir en busca de los exmenas para agredirlos y dejarles muy claro que no los quieren en su territorio.
Un vecino consiguió grabar con su teléfono móvil una de estas agresiones y el vídeo ya obra en poder de las autoridades competentes. En las imágenes se aprecia con claridad cómo, al anochecer, un grupo de vecinos logra localizar a dos jóvenes argelinos, se bajan del vehículo provistos con palos, cadenas y otro tipo de armas. Acto seguido, interceptan a los chicos y la emprenden a golpes hasta dejarlos en el suelo totalmente inconscientes. Cuando los testigos comenzaron a gritar, los agresores se volvieron a subir en el coche y emprendieron la huida.
Al tratarse de un hecho registrado en la zona de la Playa de Palma, agentes de la Policía Nacional se hicieron cargo de la investigación. Por su parte, la Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de Llucmajor, mantiene bajo vigilancia s'Arenal para evitar un nuevo estallido de violencia, cuando una multitud intentó linchar a un grupo de supuestos delincuentes argelinos. Tal y como ocurrió en la barriada palmesana de Son Gotleu, la tensión se palpa en el ambiente y el gran dispositivo de vigilancia pretende rebajar la crispación. Los agentes siguen desplegados, no sólo en la primera línea de la playa, donde habitualmente actuaban los carteristas rumanos, y que ahora han sido expulsados por un grupo de violentos magrebíes, sino también en las calles próximas al Pont des Jueus, que separa los dos términos de Palma y Llucmajor.