Imagen del vaso del que bebió la afectada. La Policía Nacional mantiene bajo custodia el contenido del mismo.

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Un juzgado de Instrucción investiga un posible delito de lesiones y otro de manipulación de alimentos por el caso del café con insectos en el Aeropuerto de Palma. La denunciante, una joven trabajadora en Son Sant Joan, estuvo varios días ingresada en la UCI después de beber un café adquirido en una máquina expendedora en el que aparecieron flotando varios insectos y sufrió un shock el pasado 22 de abril.

La juez ha acordado tomar declaración como investigado al gerente de la empresa Areas, titular de la expendedora en la que la joven adquirió la bebida. Le requiere además para que aporte al juzgado todos los documentos sobre la instalación como sus permisos sanitarios y la acreditación del cumplimiento de normas de seguridad alimentaria.

Además, entre las pruebas que reclama consta un análisis del alimento que tomó la afectada que fue precintado por los agentes que actuaron para verificar si había productos caducados o contaminados por insectos o cualquier otro elemento que pudiera provocar una crisis alérgica a la víctima. También requiere a un informe médico sobre la afectada para averiguar si padecía de alguna patología previa relacionada con alergias o episodios similares y toda la documentación médica del suceso.

Una vez se disponga de toda la documentación, la magistrada encarga al forense que elabore un informe para determinar si existió una relación de causalidad entre el shock anafiláctico sufrido y el café con insectos.

La primera diligencia, en cualquier caso, será la toma de declaración de la joven afectada. La decisión de la magistrada llega después de que un informe elaborado por el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional descartara una posible responsabilidad criminal en lo ocurrido. Ese atestado llevó a que la jueza decretara hace una semana un sobreseimiento provisional de la causa. Sin embargo, contra esa resolución recurrieron tanto la acusación particular que representa a la afectada como la Fiscalía. La jueza acepta esa petición, «revisadas en profundidad las documentales aportadas y lo razonamientos». Valora que «la gravísima lesión producida que significó el ingreso en la UCI de la denunciante, merece investigar si esta reacción física tuvo o no relación con la ingesta de ese café de máquina con un vaso que apareció lleno de insectos».