La Fiscalía investiga mensajes «falsos» y de «odio» contra menores migrantes en redes sociales tras el asesinato el pasado fin de semana de un niño de 11 años en Mocejón (Toledo). Fuentes del Ministerio Público han confirmado este martes a Europa Press que están estudiando «la trascendencia jurídico penal de determinados mensajes difundidos en los últimos días, fundamentalmente a través de redes sociales, en los que se criminaliza de forma generalizada a personas extranjeras difundiendo mensajes falsos».
La Fiscalía señala que esos mensajes van «dirigidos especialmente contra menores sin referentes familiares en España, con el propósito deliberado de despertar entre la población sentimientos de odio, hostilidad y discriminación contra los mismos». Este martes, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha arremetido «contra lo sembradores de odio que han aprovechado una desgracia humana, como es la muerte de un niño de 11 años, para saldar todos su odios en redes sociales».
«¿Se puede ser más cruel y miserable?», se ha preguntado la representante del Gobierno central en Castilla-La Mancha, que este martes ha ofrecido una rueda de prensa después de la detención de un joven de 20 años como presunto autor de la muerte del menor. Tolón ha reclamado «a los sembradores de odio que sean humanos y se comporten como tal».
«Sus bulos hacen daño y pueden provocar ira a gente inocente. No se puede aprovechar una desgracia para crear otra. Eso es cruel», ha instado. En este contexto, Izquierda Unida ha anunciado que presentará una denuncia ante la Fiscalía por la proliferación de mensajes de odio en la red social X (anteriormente conocida como Twitter) a raíz del crimen ocurrido en el municipio toledano.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Primero, los MENAs deberían ser devueltos a sus países de origen para volver con sus padres o ser mantenidos por sus gobiernos. Segundo, España no es una ONG y los españoles no pagamos impuestos para dar pan a perro ajeno. Tercero, todo el mundo sabe que muchos de estos chavales ya son mayores de edad y que se ponen a los delinquir en cuanto llegan. Cuarto, la gente tiene derecho a expresar sus opiniones libremente y a equivocarse. Si el gobierno y los medios de comunicación ocultan sistemáticamente la identidad de los delincuentes es normal que la ciudadanía especule sobre la identidad de un criminal cada vez que haya un nuevo suceso.