Un agente somete a un conductor a la prueba del etilómetro. | Policía Local de Palma

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Un conductor de nacionalidad colombiana y 30 años de edad fue detenido este lunes después de estrellar su coche contra otro que se encontraba estacionado e intentar darse a la fuga. Los hechos se produjeron cerca de las 23.20 horas en la calle de la Reina María Cristina de Palma, donde los agentes de la Unidad Nocturna (UNOC) de la Policía Local fueron requeridos por un grupo de personas que se encontraba reteniendo al causante de accidente. Cuando los policías llegaron, se entrevistaron con el propietario del vehículo afectado, que manifestó haber visto desde su terraza como el hombre había golpeado al suyo, que se encontraba estacionado y que el copiloto se sentó en el asiento del conductor aprovechando que éste se bajó y huyó del lugar.

Los policías también se entrevistaron con el sospechoso, que presentó síntomas evidentes de haber consumido bebidas alcohólicas, por lo que fue sometido a la pruebas establecidas, pero las realizó de manera incorrecta en varias ocasiones a propósito, por lo que no se pudo obtener ningún resultado. Al tratar de ser identificado, el retenido dijo que iba indocumentado y se negó a facilitar sus datos personales. Del mismo modo, al preguntarle por el permiso de conducir, contestó que no tenía.

Dado el comportamiento del hombre, los funcionarios procedieron a su detención y lo trasladaron hasta el cuartel de San Ferran, a la vez que era informado de ser el responsable de la comisión de los presuntos delitos contra la seguridad del tráfico, al haberse negado a hacer las pruebas de detección alcohólica y al conducir sin haber obtenido el carnet de conducir. Una vez en las dependencias policiales, facilitó una fotografía de su pasaporte y la dirección de su domicilio a los agentes.

El instructor del atestado determinó que una patrulla se dirigiera hasta la dirección proporcionada por el detenido, para comprobar si los datos eran correctos. Al confirmar que era su domicilio y que la persona con la que convivía había facilitado toda su documentación, se determinó su puesta en libertad, manteniéndose abierta la investigación por los delitos que se le acusan y se le informó que tiene la obligación de comparecer ante el juzgado cuando se le requiera.

Desde la Policía Local de Palma recuerdan que la negativa a hacer las pruebas de alcoholemia es un delito que puede implicar para el conductor penas de prisión que van desde los seis meses hasta un año, además de la privación del derechos a conducir vehículos de motor y ciclomotores por un tiempo de hasta cuatro años.