El pasado fin de semana en Mar y Terra acudieron a ver la obra personalidades de la cultura de la Isla como la artista Susy Gómez, los diseñadores Sebastià Pons y Pablo Erroz, la fotógrafa Claire O'Keefe, el actor Pep Noguera y la bailarina Mar Aguiló.
El gran logro del artista es convertir en poesía algo que fuera de la intimidad puede resultar obsceno o pornográfico, que no es que critique, sería absurdo pues es la forma más común de practicar sexo con otras personas en la actualidad, en la que las redes se han convertido en un inmenso parque temático sexual que ofrece además todas las fantasías imaginables, incluso la de convertirse en voyeur o en exhibicionista para un público heterogéneo repartido por todo el planeta, pero que sin nosotros saberlo puede estar también en el pueblo de al lado.
Lluís actúa para voyeurs de la red reales que le contemplan a través de la cámara sin ser conscientes de que están participando de un espectáculo visto por personas que están contagiadas por la capacidad del artista de contagiar sus emociones a través de gestos, algunos reproduciendo imágenes míticas del arte de los grandes clásicos de la pintura o movimientos que nos llevan a momentos del ballet más convencional en el que ningún gesto se deja al azar.
El artista, rodeado de lo más cool de la Isla, en este teatro tan bello, nos enamoró a todos en una lluviosa tarde de sábado en la que los sentimientos y las emociones fluían a flor de piel mas que nunca. ¡Qué genio! Lluís Garau, junto al premiado director Joan Porcel, están preparando la versión cinematográfica de La carn, que verá la luz en 2025 y que cuenta con el apoyo de IB3 y el ICIB. Enhorabuena.
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