Los efectos fisiológicos beneficiosos de la exposición solar son:
- Un aumento de la temperatura local y de la temperatura general. De este modo aumenta la frecuencia cardíaca y la respiratoria y se activa nuestro metabolismo.
- Rubefacción cutánea, es decir, mejora nuestro color. Además estimula el proceso de cicatrización y mejora la defensa del tejido.
- Tiene una acción relajante y calmante que aporta sensación de bienestar.
- Produce un aumento del volumen corporal y de la tonicidad de la musculatura.
- Estimula la síntesis de la vitamina D, conocida como 'hormona de la felicidad'.
Por su parte, los efectos perjudiciales son:
- El eritema o quemadura cutánea. En algunos casos, se puede llegar a producir fotodermatosis.
- Trastornos oculares como conjuntivitis, sensación de moscas volantes y/o irritaciones.
- Una exposición excesiva puede presentar signos de anorexia (demasiadas horas de sol quitan el hambre), fatiga o debilidad.
- Tiene una acción carcinogénica que provoca lesiones en el ADN.
- Puede derivar en una insolación o golpe de calor: cansancio, dolor de cabeza, vértigo, náuseas, contracturas musculares...
Por lo tanto, tomar el sol conlleva mucho efectos positivos siempre que se haga con moderación. Es suficiente una exposición de unos 30 minutos al día para disfrutar de todas las cosas buenas que nos aporta la radiación UV.
De todas formas, hay que tener en cuenta que para evitar los efectos dañinos del astro rey, siempre hay que utilizar protección solar. Si tienes dudas sobre el protector solar que tienes que usar, en esta noticia puedes consultar cuál es el factor (SPF) más adecuado para tu caso.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.