Imagen de recurso. | Photographer:ManuReyes

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El verano es la estación perfecta para disfrutar del aire libre, las vacaciones y el tiempo con amigos y familiares. Sin embargo, también es una oportunidad ideal para adoptar hábitos más sostenibles y reducir nuestra huella ambiental. Aquí te presentamos siete pequeños cambios que puedes hacer para tener un verano más ecológico.

1. Opta por el transporte sostenible
El transporte es una de las principales fuentes de emisiones de CO2. Este verano, considera caminar, ir en bicicleta o utilizar el transporte público en lugar de conducir. Si planeas un viaje, opta por trenes o autobuses en lugar de vuelos cortos, ya que estos medios de transporte tienen un menor impacto ambiental.

Autobús de la EMT de Palma.

2. Usa protector solar ecológico
Muchos protectores solares contienen químicos que son dañinos para los océanos y la vida marina. Busca opciones biodegradables y libres de oxibenzona y octinoxato, ingredientes que contribuyen al blanqueo de los corales. Además de proteger tu piel, estarás cuidando el medio ambiente.

3. Reduce el uso de plástico
El verano suele estar lleno de picnics, barbacoas y eventos al aire libre, lo que puede resultar en un aumento del uso de plásticos desechables. Lleva tus propios utensilios reutilizables, botellas de agua y bolsas de tela para reducir la cantidad de residuos plásticos que generas.

4. Elige productos locales y de temporada
Aprovecha los mercados locales para comprar frutas y verduras frescas de temporada. Los productos locales no solo son más frescos y sabrosos, sino que también tienen una huella de carbono menor debido a la reducción en el transporte y embalaje.

Mercado de Santanyí.

5. Ahorra agua
El agua es un recurso precioso, especialmente durante los meses de verano. Implementa prácticas como tomar duchas más cortas, regar el jardín temprano en la mañana o al atardecer y usar dispositivos de ahorro de agua en los grifos y duchas.

6. Apaga y desconecta
Durante el verano, aprovecha al máximo la luz natural y apaga las luces y aparatos electrónicos cuando no los necesites. Además de ahorrar energía, reducirás tu factura de electricidad.

7. Participa en actividades de limpieza
Únete a grupos locales que organizan limpiezas de playas, parques y ríos. Estas actividades no solo ayudan a mantener los espacios naturales limpios, sino que también sensibilizan sobre la importancia de cuidar nuestro entorno.

Adoptar estos pequeños cambios no solo hará que tu verano sea más ecológico, sino que también contribuirá a la conservación del medio ambiente para las futuras generaciones. ¡Disfruta de un verano sostenible y lleno de conciencia ecológica!