Primero, evalúa la situación desde dentro del vehículo. Si observas que el nivel de agua comienza a cubrir la mitad de las ruedas o más, evita avanzar. El intentar seguir podría causar que el motor se apague debido a la entrada de agua en el sistema de escape o en el motor, dejándote sin poder maniobrar el vehículo. Además, avanzar en estas condiciones aumenta el riesgo de que el agua entre en el interior del coche, poniendo en peligro tanto al vehículo como a los pasajeros.
En caso de que el coche ya esté detenido en una zona inundada, evita intentar encender el motor nuevamente. Hacerlo podría causar un daño irreparable y agravar la situación. En cambio, evalúa si es seguro salir. La mejor opción es a través de una ventana, especialmente si el nivel del agua es alto y abre la puerta resulta complicado. Herramientas como un rompecristales o un objeto contundente pueden ser útiles para romper una ventana en caso de emergencia.
Si logras salir del coche, busca un lugar elevado y seguro. No intentes caminar en aguas profundas o corrientes rápidas, ya que estas pueden arrastrarte fácilmente, incluso si tienen una apariencia tranquila. Recuerda que el agua de una inundación puede llevar escombros o esconder peligros invisibles, como pozos abiertos.
Una vez que hayas llegado a un lugar seguro, contacta con los servicios de emergencia para informar sobre tu situación y sigue sus instrucciones. Si el coche aún es recuperable después del incidente, no olvides secar los frenos antes de intentar conducir nuevamente. Esto se hace pisando suavemente el pedal varias veces para garantizar que funcionen correctamente antes de proseguir.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.