Ingo Volckmann, propietario del Atlético Baleares, observando un entrenamiento. | Pere Bota

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Tras meses de silencio y ante la trascendencia del momento, el propietario del Atlético Baleares, Ingo Volckmann lanzó un mensaje de ánimo al equipo y desveló sus planes de futuro con la SAD blanquiazul. «Si bajamos o nos quedamos, el año que viene estaré aquí y vamos a luchar», aseguraba el propietario del club en un mensaje a través de las redes sociales, quien remarca que «quería luchar por el ascenso, pero hay que mirar adelante», confiando plenamente en la salvación del equipo de Tato.

Además, anima a la afición a arropar a los suyos el domingo (12 horas) ante Osasuna B en un duelo vital para salir de la zona de descenso a Segunda RFEF. A la vez, se mostró crítico con los arbitrajes recibidos en las últimas jornadas por el ATB. «He visto buena actitud, pero hemos tenido mala suerte y decisiones de los árbitros que no entiendo. Así es difícil ganar, si juegas contra catorce», aseguraba con ironía.

Hubo dosis de crítica por parte de Volckmann en su alocución, en la que dejó claro que «no es lo que pensaba. Estamos abajo porque no jugamos bien y lucharemos para evitar el descenso. Ahora dependemos de los jugadores y estoy seguro de que lo van a sacar», decía con rotundidad. A la par, hizo un llamamiento a la hinchada del Atlético Baleares para que el domingo acuda al Estadi. «Necesitamos a todos. Si ganamos un partido, ganaremos dos, tres y cuatro. Ahora vienen dos importantes en casa», proseguía Ingo, que lanzó un mensaje de tranquilidad respecto al futuro de la SAD y su participación, y a la vez positivo en cuanto al desenlace de una difícil temporada en la Primera RFEF.