Otra final bajo mínimos

«Nos enfrentamos al partido más complicado por cómo estamos físicamente. El esfuerzo físico fue muy grande, hay poco tiempo para recuperar y además no tenemos a Amadi Ikpeze», explicó ayer el técnico Álex Pérez, que apela al factor Son Moix para retar a la lógica y a la fe que está demostrando la plantilla. «Lo que podemos prometer es que verán a un equipo con una plantilla muy corta pero con chicos que se dejan la piel como si el partido acabase en el minuto siguiente. Lo que van a ver es mucho sacrificio y esfuerzo y, si podemos desplegar nuestro juego ofensivo, se verá un partido muy divertido», señaló. En este aspecto una de las claves del resurgir del Palmer Alma Mediterránea Palma es Elijha Brown, que junto a Van Beck, será determinante para intentar superar a un rival que llega en un buen momento de juego y resultados tras tres victorias consecutivas que les han instalado en la cuarta plaza.

Rival

Los nombres de Micah Speight, Juan Rubio, Chumi Ortega, Noah Allen o Prince Ali reflejan en buena medida el nivel del Palencia, que llega a Ciutat advertido de las dificultades que tuvo en el encuentro de la primera vuelta pese a llevarse la victoria (76-74). El potencial del rival y las limitaciones de la plantilla comprometen las opciones del Palmer Palma ahora que los isleños se habían siutado a dos victorias de la frontera que marca la salvación. Por este motivo, Álex Pérez tiene claro que el apoyo del sexto hombre será importante en el Palau, donde han conseguido hacerse fuertes en el tramo más reciente de la competición. «Somos nosotros los que tenemos que demostrar que queremos ser un equipo de LEB Oro y eso es algo que estamos intentando cada semana», dijo.