Xavi Sastre

Xavi Sastre posa para este diario. | M. À. Cañellas

Fernando FernándezInca24/09/11 0:00
TW
3

Caliente y tocado por una derrota que pudo no haberlo sido, Xavi Sastre explotó en la sala de prensa del Palau d'Esports ante un factor ajeno a lo que acontenció sobre el parqué. La escasa afluencia de público en las gradas en el arranque liguero y durante la pretemporada acabaron por encender al técnico del Logitravel Mallorca, que hizo público su malestar ante la falta de apoyos que el proyecto con sede en la capital de es Raiguer posee en toda la isla. «Nos sentimos solos y encima se nos critica», comentaba Sastre, quien quiso dejar claro que sus palabras no iban dirigidas hacia los que asistieron a la cita frente al Granada.

«En pretemporada, tras el esfuerzo para estar en LEB Oro, traemos al Menorca y vienen 200 espectadores; viene el Samara), con cuatro exjugadores de la NBA... y vienen 225. Y en el primer partido de Liga, poco más», explicaba Sastre. «Nos sentimos abandonados por la gente, por los que no están con nosotros... y encima, viendo que la directiva, con sus fallos y carencias, pero también con sus aciertos, se juega su patrimonio, ves que nadie nos apoya y sólo oyes críticas. Eso fastidia y es frustrante, pero yo voy a lo mío que es entrenar y llevar a este equipo a competir y conseguir sus objetivos, y estos pasan por salvarnos», añadió Xavi.

Repercusión

El responsable técnico del Logitravel admite que a nivel mediático «es difícil hacer un gran seguimiento de tantos grandes deportistas que hay en esta isla, pero nosotros luchamos por tener baloncesto de calidad y la repercusión es mínima». De la misma manera, recuerda la presencia de otro equipo isleño en la LEB Oro, y entiende que «en Menorca, el baloncesto es algo brutal, pero reciben un apoyo más importante».

La imagen de la grada del Palau hirió el ánimo de Sastre y los suyos. «Los jugadores lo han notado, y no me entra en la cabeza, porque en LEB Plata, teníamos más gente, en especial en el playoff. Los que vienen se merecen un diez, pero con todos los buenos aficionados, a lo mejor el resultado sería diferente», espetó el preparador, que hace autocrítica «porque yo tampoco voy a otros eventos deportivos». Eso sí, reitera que «si a alguien no le interesamos, bien, pero que no se nos ponga a parir», finalizó Sastre, quien espera que en el derbi ante el Menorca la hinchada responda a la llamada del baloncesto.