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Atlético y Real Madrid dirimen mañana el derbi más incierto de los últimos años. El conjunto colchonero se planta a la cita más esperada con la intención de dar un salto cualitativo que se espera en el Manzanares desde que el equipo volvió a la máxima categoría de la mano de Luis Aragonés, una vez que parece que la paz social sí ha llegado de una vez al club. Mientras, el Real Madrid llega al partido de la máxima rivalidad envuelto en un clima de euforia tras noquear el pasado miércoles a la Real Sociedad en el famoso encuentro de los seis minutos. Tras ese conato de partido, el de mañana será el primer test serio para Luxemburgo, que lógicamente vivirá su primer derbi. También será el primero para César Ferrando. Ambos preparadores cuentan ya con un denominador común. Y es que los dos van a hacer un planteamiento ambicioso y apostando por dos chavales que viven lejos del hábitat profesional para la demarcación de lateral derecho, por ausencia de los titulares. Se caen Salgado y Aguilera, por sanción y lesión respectivamente, e innovan con chicos de abajo, sin experiencia, pero con la ilusión intacta.

Molinero, con 19 años, y Arbeloa, con 21, se ponen en un escaparate donde se les va a mirar con lupa, porque en las bandas se van a dirimir duelos muy interesantes que de salir airosos les van a permitir sobrevivir y ganarse la vida en este complicado mundo del fútbol.

Arbeloa verá por primera vez en su vida al nuevo fichaje del Atlético, Gronjkaer. Si Ferrando echa al danés al costado izquierdo, como así parece, Arbeloa se va a encontrar enfrente con un tipo que desea agradar. No lo tendrá fácil, pero si pasa el examen, Arbeloa puede ahorrarle mucho dinero al Madrid.

Desde hace tiempo el Madrid busca un recambio que dé aire a Míchel Salgado, incombustible y sin relevo natural estos años. El Madrid preguntó el año pasado por el jugador del Sevilla Sergio Ramos y se tasó en 4.000 kilos, de los de antes. Nada que hacer con esa tarifa. Por eso, Salgado no puede permitirse el lujo de tener un resfriado.

Lleva años sin descanso y afortunadamente nunca ha sufrido una lesión grave. De ahí que Arbeloa cuente con una ocasión de oro el domingo para demostrar su ardor guerrero. En el filial, lo ha hecho bien, incluso de central donde juega últimamente. Aunque es en la derecha, con Juanfran por delante, cuando esa banda ha sido realmente de lujo en el Real Madrid B. Hoy, por cierto, por fin Juanfran ha vuelto a entrenarse con el primer equipo.