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El entrenador del Real Madrid, José Mourinho, ha declarado, en la rueda posterior al partido que ha enfrentado a su equipo con el Levante, en el que los madrileños han perdido por 1-0, que el Levante «hace lo que quiere en su casa» y que los árbitros «se lo permiten».

«Hemos tenido un penalti muy claro que ha condicionado el partido, y no quiero quitarle el mérito al Levante, pero en su estadio los árbitros les dejan hacer y eso ellos lo hacen muy bien», prosiguió. El portugués añadió que tenía que felicitar a los jugadores levantinistas «por listos y porque saben tirarse, jugar, perder o ganar tiempo», y que sus jugadores «no se manejan» en ese hábitat.

Al responder las preguntas de los periodistas, Mourinho se ha mostrado muy crítico con la actuación arbitral y con algunos de sus jugadores, especialmente con el alemán Khedira con el que «ya había hablado» de lo que podía pasar, a pesar de lo cual «ha caído en la trampa», por lo que le responsabilizaba «en parte de la derrota».

Finalmente, al ser preguntado por la suplencia del portugués Cristiano Ronaldo, el entrenador respondió que fue el mismo jugador quien le comentó antes del partido que no se encontraba del todo bien, y que prefería «no salir de titular», pues sus sensaciones no eran «del todo buenas».