El Valladolid no quería dejarse llevar por un exceso de confianza tras su triunfo en la ida (0-1). El equipo vallisoletano repitió el once inicial que ganó en el estadio de Santo Domingo porque Jaime Jiménez, el guardameta titular, no se había recuperado de su lesión.
El Alcorcón, arropado por varios centenares de aficionados amarillos que se desplazaron hasta Valladolid para apoyar a su equipo, no renunció a su estilo de juego fuera de casa pese a necesitar la victoria. Cautela defensiva y juego directo con Oriol Riera en punta fue su puesta en escena inicial.
El equipo de Anquela no arriesgó a lo loco, ni fue desde el inicio a por el partido. Su única baja era la del central francés Babín, lesionado, así que el equipo alfarero jugó como ya se esperaba y el Real Valladolid no pasó por excesivos problemas defensivos.
Los de Djukic gobernaron el medio campo con solvencia, empujados por un ambiente extraordinario en las gradas. La primera ocasión clara no llegó hasta el minuto 30 y fue de los madrileños, cuando Montañés disparó y Dani Hernández rechazó con habilidad.
Respondió Óscar González a los 38 minutos y ésas fueron las únicas ocasiones claras de un primer tiempo muy trabado en el que el insulso centrocampismo no dejó que el buen fútbol se asomara.
Cuando la primera parte agonizaba, Fernando Sales aprovechó un envío largo de Agus para marcar con la cabeza, sorprendiendo a Dani Hernández (min. 47).
Este gol incendiaba la eliminatoria y olía a "alcorconazo", aunque con este marcador el Real Valladolid seguía opositando claramente a Primera División, ya que por haber sido tercero en la liga tenía ventaja.
Sin embargo, esta circunstancia hacía que el Alcorcón necesitara otro gol y que le diera igual que marcara el Valladolid. Así las cosas, los madrileños salieron algo más ofensivos en la reanudación ante un Valladolid nervioso aunque muy pronto lo arregló Javi Guerra tras aprovechar un buen pase de Óscar González (min. 52).
Sisi pudo marcar a diez minutos del final pero su disparo acabó en el poste tras tocar en el guardameta Manu Herrera. Ese tanto pudo haber evitado la agonía de los últimos minutos en los que el Valladolid tuvo ocasiones pero sufrió, y mucho, aunque al final consiguió su objetivo de volver a Primera División.
El último ascenso del equipo en casa fue el 18 de mayo de 1980 tras ganar al Racing de Santander en el Viejo Zorrilla. Han pasado ya 32 años y los posteriores ascensos se consiguieron siempre fuera de Valladolid. La fiesta esta vez fue en Zorrilla. El Real Valladolid asciende a Primera División tras evitar un "alcorconazo" que se atisbó en Zorrilla tras el gol de Fernando Sales poco antes del descanso, pero Javi Guerra lo arregló en la segunda parte y el equipo vallisoletano volverá la próxima temporada a estar entre los grandes.
El Valladolid no quería dejarse llevar por un exceso de confianza tras su triunfo en la ida (0-1). El equipo vallisoletano repitió el once inicial que ganó en el estadio de Santo Domingo porque Jaime Jiménez, el guardameta titular, no se había recuperado de su lesión.
El Alcorcón, arropado por varios centenares de aficionados amarillos que se desplazaron hasta Valladolid para apoyar a su equipo, no renunció a su estilo de juego fuera de casa pese a necesitar la victoria. Cautela defensiva y juego directo con Oriol Riera en punta fue su puesta en escena inicial.
El equipo de Anquela no arriesgó a lo loco, ni fue desde el inicio a por el partido. Su única baja era la del central francés Babín, lesionado, así que el equipo alfarero jugó como ya se esperaba y el Real Valladolid no pasó por excesivos problemas defensivos.
Los de Djukic gobernaron el medio campo con solvencia, empujados por un ambiente extraordinario en las gradas. La primera ocasión clara no llegó hasta el minuto 30 y fue de los madrileños, cuando Montañés disparó y Dani Hernández rechazó con habilidad.
Respondió Óscar González a los 38 minutos y ésas fueron las únicas ocasiones claras de un primer tiempo muy trabado en el que el insulso centrocampismo no dejó que el buen fútbol se asomara.
Cuando la primera parte agonizaba, Fernando Sales aprovechó un envío largo de Agus para marcar con la cabeza, sorprendiendo a Dani Hernández (min. 47).
Este gol incendiaba la eliminatoria y olía a "alcorconazo", aunque con este marcador el Real Valladolid seguía opositando claramente a Primera División, ya que por haber sido tercero en la liga tenía ventaja.
Sin embargo, esta circunstancia hacía que el Alcorcón necesitara otro gol y que le diera igual que marcara el Valladolid. Así las cosas, los madrileños salieron algo más ofensivos en la reanudación ante un Valladolid nervioso aunque muy pronto lo arregló Javi Guerra tras aprovechar un buen pase de Óscar González (min. 52).
Sisi pudo marcar a diez minutos del final pero su disparo acabó en el poste tras tocar en el guardameta Manu Herrera. Ese tanto pudo haber evitado la agonía de los últimos minutos en los que el Valladolid tuvo ocasiones pero sufrió, y mucho, aunque al final consiguió su objetivo de volver a Primera División.
El último ascenso del equipo en casa fue el 18 de mayo de 1980 tras ganar al Racing de Santander en el Viejo Zorrilla. Han pasado ya 32 años y los posteriores ascensos se consiguieron siempre fuera de Valladolid. La fiesta esta vez fue en Zorrilla.
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