La Federación Cántabra de Fútbol ha informado de que, tras desplomarse el jugador en el terreno de juego, las asistencias médicas intentaron reanimarlo.
En un primer momento fue atendido por los efectivos del 061 que se habían desplazado desde Cabezón de la Sal hasta el campo.
Posteriormente también llegó hasta el terreno de juego una UVI móvil desde Torrelavega, en la que fue trasladado hasta el hospital de Valdecilla, en Santander.
A pesar de los intentos por reanimarlo durante más de 30 minutos los efectivos de emergencias no pudieron hacer nada para salvar su vida.
La Federación Cántabra de Fútbol ha manifestado su «sentido pésame a todos los familiares» y compañeros del joven fallecido.
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