«A dichos actos no se les puede otorgar ningún tipo de justificación, y en consecuencia mostramos toda nuestra repulsa y utilizaremos todas las herramientas a nuestro alcance para ofrecer respuestas encaminadas a evitar, reeducar si fuera necesario y conseguir eliminar este tipo de actitudes presentes en los campos de fútbol», dice el comunicado del Calvià, que califica la jornada como «un día triste» para la historia de un club con más de 50 años de trayectoria y que ha ofrecido una respuesta a la altura y contundente a un episodio de violencia injustificable.
El Calvià deja claro que no le temblará el pulso a la hora de tomar medidas al respecto y ha precisado que abre una investigación interna y al mismo tiempo aparta de forma provisional al jugador involucrado en las agresiones que propiciaron que un jugador del Independiente pasara la noche en observación en la Policlínica Miramar. «Más allá de las decisiones que tome en las próximas semanas el Comité de Competición de la FFIB, nuestro Club ya ha iniciado de manera urgente una investigación interna para conocer la gravedad de los hechos ocurridos. Como primera medida provisional, se ha decidido apartar de manera inmediata y temporal al jugador involucrado en los hechos, hasta poder esclarecer de manera fehaciente lo sucedido. Dicha investigación se realiza con el fin de poder adoptar una mejor y justa decisión hacia él», argumenta el comunicado en el que también agradece «al resto de jugadores su mediación durante lo sucedido, ayudando a que la situación se zanjara sin más incidencias»
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