Imagen del partido que enfrentó al Portmany y al Llosetense esta temporada en tierras ibicencas. | R.D.

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El Llosetense confía en resolver en breve la deuda que ha provocado que la FIFA le imponga un castigo de tres ventanas sin poder incorporar jugadores para el primer equipo. Los responsables del club prevén cumplir con los compromisos adquiridos para competir en Tercera División la próxima temporada, puesto que la sanción quedaría extinguida una vez que satisfaga la deuda contraída con un jugador cuya denuncia ha provocado la actuación del organismo que rige el deporte rey a nivel internacional.

Según ha podido saber este periódico, la directiva del Llosetense tiene una previsión de ingresos para poder liquidar la deuda, que rondaría los 10.000 euros, y en el seno de la entidad creen que no existirá ningún problema para que el castigo se levante pudiendo incorporar jugadores a tiempo para volver a estar en la parrilla de salida de la próxima campaña en Tercera División en un proyecto en el que ya no estará el que ha sido su entrenador las últimas temporadas, Nico López.

El club de es Raiguer, que el año pasado celebró su Centenario, figura actualmente en la plataforma de sanciones de la FIFA, cuyo objetivo es proporcionar a los grupos de interés, entre los que figuran jugadores y clubes, así como el público en general, una lista de todas las entidades sobre las que pesa este veto. El organismo deja claro que los clubes sólo podrán volver a inscribir nuevos jugadores cuando se haya cumplido íntegramente la sanción o la administración de la FIFA la levante. En el caso del Llosetense el castigo, hasta que no cumpla con los compromisos adquiridos, es de tres ventanas sin poder inscribir jugadores para el primer equipo, por lo que no podría dar de alta a futbolistas para su plantilla este verano, ni en invierno y tampoco en el próximo período estival.