Lorenzo, en su 'box' durante el Gran Premio de la República Checa. | FILIP SINGER - STF - EFE - EPA

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El mallorquín Jorge Lorenzo (Yamaha) tiene todo a su favor este próximo fin de semana, en Indianápolis, para dar otro paso en su camino hacia el título de Moto GP.

Además, el segundo gran premio de 2010 en los Estados Unidos podría pasar a la historia del motociclismo español si uno de sus pilotos se impusiera, ya que superaría el número de victorias en una misma temporada. De momento, y tras el triplete del circuito checo de Brno, ya tiene 22, las mismas que en 1988, cuando había cuatro cilindradas, y que en 2006 y 2009, ambas con tres categorías.

Por su parte, Lorenzo se ha impuesto en siete de las diez carreras disputadas cuando el Mundial de Motociclismo ya avanza en su segunda mitad, y en las otras tres ha sido segundo. Ni en el mejor de sus sueños el español hubiera podido imaginar el pasado invierno que llegaría a Indianápolis con 77 puntos de diferencia sobre el segundo, su compatriota Dani Pedrosa (Honda).

Además, el piloto isleño ya sabe lo que es ganar en la histórica pista del norte de los Estados Unidos. En 2009 Lorenzo se impuso en Indianápolis con autoridad y desde entonces ha cumplido un año casi redondo.