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El piloto mallorquín Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) no pudo apurar sus opciones de lograr reeditar el título mundial de MotoGP y sufrió una de las lesiones más complejas de su larga carrera deportiva. El balear, que llegaba al Gran Premio de Australia obligado a recortar distancias sobre Casey Stoner para llegar a Malasia y Valencia con esperanzas, vio como su objetivo era frenado bruscamente al sufrir una caída durante los últimos entrenamientos libres previos a la disputa del Gran Premio de Australia, un incidente en el que se produjo una lesión en la mano izquierda cuyas consecuencias iban a ser más contundentes con el paso de las horas, pese a que las primeras impresiones reflejaban una posible amputación de la primera falange del dedo anular de su mano izquierda, posibilidad que fue descartada de inmediato.

Lorenzo se produjo una profunda herida en el dedo anular de la mano izquierda, una abrasión con pérdida de uña, y pese a la mejoría sufrida al recibir anestesia local, la gravedad de la herida le obligó a ser baja para la carrera australiana al requerir cirugía, con lo que el campeonato quedaría sentenciado tras el triunfo de Stoner, quien acudió al centro hospitalario ubicado en el mismo circuito de Phillip Island para interesarse por el estado de su rival y compañero de parrilla.

El mallorquín fue trasladado de imediato y tras un primer diagnóstico y cura en helicóptero para ser operado durante la jornada de ayer. La intervención realizada a Lorenzo, que en todo momento estuvo acompañado por tod su equipo de confianza, concluyó con éxito en un hospital de Melbourne. Allí se trabajó sobre el dedo anular izquierdo que se lesionó tras caerse durante los últimos entrenamientos libres, según informó el equipo Yamaha, que ha anunciado en la jornada de hoy un nuevo parte médico más completo sobre el estado del dedo del tricampeón del mundo de motociclismo.

Complejidad

«El cirujano fue capaz de salvar los nervios y los tendones del dedo lesionado de Lorenzo, por lo que no verá mermada ninguna función del propio dedo o de la mano», rezaba el comunicado emitido por la escudería.

El tiempo de recuperación de Jorge Lorenzo se estima «desafortunadamente prolongado» y se confirma que no correrá el Gran Premio de Malasia, en Sepang, que se debe disputar el próximo fin de semana.

En cuanto al Gran Premio de Valencia, el primer fin de semana de noviembre y última manga del Campeonato del Mundo, la decisión de correr dependerá de la evolución del piloto una vez regrese a Barcelona con el fin de proseguir su recuperación y la rehabilitación del dedo afectado por la abrasión y erosión que le llevó a poner fin a su concurso en Melbourne, y puede que en último extremo, para toda la temporada, para cuya finalización restan dos mangas.

Además de la grave lesión en el dedo anular, Lorenzo sufre una luxación en el dedo corazón de la mano afectada, que sufrió el impacto del manillar de su M1 sobre el asfalto y fue arrastrada durante algunos metros, lo que acabó por seccionarle el dedo.

Lorenzo llegaba a Phillip Island como única alternativa en la carrera por la corona de MotoGP para Casey Stoner, pero su caída y retirada del Gran Premio de Australia convirtió la carrera en un mero trámite para el oceánico, que obtuvo un nuevo triunfo en su territorio, mientras Lorenzo viajaba rumbo a un hospital en el que iba a ser intervenido de su dedo anular izquierdo, la última lesión de una lista que en los últimos tiempos había menguado dadas las excelentes prestaciones del balear, que hace dos años ya sufrió un percance, sin consecuencias, en el mismo trazado.