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El finlandés Valtteri Bottas, uno de los pilotos más mediáticos de la parrilla de la Fórmula Uno, ha elegido Mallorca para seguir preparando la temporada 2022. Y lo hace en compañía de su pareja, la ciclista profesional australiana Tiffany Cromwell, que se ha concentrado con su equipo, el Canyon SRAM Racing, en un hotel de la Isla, como escenario de su campamento invernal de entrenamiento de cara a la campaña que se avecina, tanto para la corredora como para el piloto.

Tras cinco temporadas enrolado en la escudería Mercedes, como compañero del multicampeón mundial británico Lewis Hamilton, Valtteri Bottas, de 32 años, ha dado el salto a la estructura de Alfa Romeo, con la que intentará crecer dentro del certamen y volver a pisar el podio y ser regular, tras una trayectoria adornada por una decena de triunfos en el Mundial, dos subcampeonatos (2019 y 2020) y tres terceros puestos en la general (2017 y 2021). Un notable palmarés a la estela de quien fue su compañero de box y otros ilustres del motor.

Estos días, Valtteri Bottas ha ido 'a rueda' de Cromwell, con quien comparte una gran afición por la bicicleta, disfrutando juntos de la tranquilidad que ofrece el invierno mallorquín y de los recorridos que brindan sus carreteras, que son punto de encuentro para numerosos equipos que eligen la Isla para preparar la temporada en ciernes. Además, cabe destacar que la corredora oceánica es la encargada de diseñar los casos que luce el nuevo piloto de Alfa Romeo en sus participaciones en la Fórmula Uno.

Meses atrás, el piloto sorprendió a todos anunciando su divorcio con la nadadora, también finlandesa, Emilia Pikkarainen, habiendo rehecho su vida personal de nuevo con una deportista de élite como es la ciclista australiana Tiffany Cromwell, con la que Bottas ha abierto otra etapa en su vida personal y parece haber reencontrado la ilusión, que ambos comparten a ritmo de pedaladas en Mallorca, donde han pasado unos días cargados de actividad, especialmente sobre la bicicleta, nexo de unión de esta nueva pareja.

Bottas ha procurado pasar inadvertido respecto al resto de corredoras de la estructura profesional del Canyon SRAM Racing, luciendo una equipación oscura que le diferencia del resto del grupo con el que rueda por diferentes rincones de la Isla, un de los puntos de partida del ejercicio 2022 para un Valtteri Bottas que, de paso, pasa unos días en compañía de su pareja y se pone a punto para los duros meses que se avecinan sobre el asfalto de los circuitos que forman el calendario del Mundial.