En la imagen de la izquierda, Burgos sostiene un balón durante un entrenamiento.

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TOMEU TERRASA Y JOAN TORRES Amigo y compañero de selección de Carlos Roa, Germán Burgos afirma que no llega a Mallorca para que le olviden sino para trabajar por ganar títulos. En tono alegre y con las ideas claras debatió los pasajes más importantes de su vida deportiva.

ENVIADOS ESPECIALES A KÖSSEN (AUSTRIA)

El guardameta Germán Burgos ya está integrado en el grupo mallorquinista. El portero argentino cuenta en una entrevista concedida a Ultima Hora las vivencias en su país y lo que espera de su nueva trayectoria en el Mallorca.

Simpatía irradia Germán Burgos y así se llama su grupo musical. Guitarras afiladas y una voz rasgada son las señas de identidad de un grupo que triunfa en Argentina y que busca un hueco en el mercado nacional español. Cantar es para Burgos una manera de desinhibirse y de olvidar la alta competición. Dice el portero mallorquinista que uno de sus referentes musicales es Leño, extinto grupo musical de las década de los ochenta y que tenía a Rosendo Mercado como líder y alma principal. Afirman los que han visto sus conciertos y los que siguen su música que es todo vitalidad encima del escenario. Pelo largo, ropa vaquera y siempre una sonrisa en los labios, Germán Burgos combina sus dos actividades a la perfección. Sus excentricidades no le han impedido debutar como portero titular de la selección argentina en el pasado campeonato de la Copa América. Fichó por el Mallorca para sustituir a Carlos Roa «el mejor canncerbero del mundo» y llega a Palma para intentar atrapar el corazón de todos los aficionados mallorquinistas. No es fácil hacer olvidar a Roa, pero Burgos insiste en hacerlo posible.