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Apasionante. La cuarta regata fue completa. Lecciones magistrales de «Highland Fling» y «Zurich». Abardodajes como el protagonizado por el argentino «Patagonia» y el español «Estrella Damm». Y roturas como la del stay del «Breitling» marcan la crónica de la tercera jornada de la decimoctava edición de la Copa del Rey-Agua Brava de vela.

«Higland Fling», la mayor de las embarcaciones de la flota, se consolida en el liderato de la Copa del Rey. El barco escocés se impuso en la regata barlovento-sotavento de ayer y continúa en la primera plaza de la clasificación. Este sesenta pies partía como uno de los favoritos, si bien prácticamente la totalidad de los patrones esperaban un fallo que le impidiera hacerse con el triunfo final. Por el momento se está mostrando intratable y la regata media de hoy puede ser decisiva para su propia suerte y para la del resto de la flota, que necesita de un pinchazo suyo.

Los barcos españoles también navegan y desmuestran a diario que no se lo van a poner nada fácil. El «Bribón» no tuvo la misma suerte que en la regata larga y la quinta plaza cosechada lo mandó a la tercera posición de la general. El protagonista de la jornada fue el «Zurich». El barco que patronea Manuel Chirivella demostró que es uno de los mejores veleros de la competición y es ahora la gran esperanza española para conseguir la victoria. En la prueba de ayer se clasificó por detrás del «Highland Fling» y es su inmediato perseguidor en la clasificación general del grupo A. La regata del «Zurich» cobra mayor importancia si se tiene en cuenta que se vió obligado a repetir la salida.

En el grupo B manda de nuevo el «Ciudad de Melilla», ahora en solitario, tras ser el velero que mejor aprovechó la mala regata protagonizada por el italiano «Drake». La embarcación que patronea Iñaki Castañer y la italiana son en principio los dos yates que lucharán por el triunfo. Y es que el que hasta ahora podía arrebatrles el título, el «Estrella Damm» pinchó ayer y ha caido hasta la novena plaza de la general. Los tripulantes de la nave española han presentado una reclamación por el incidente con el «Patagonia» pero sus posibilidades para la victoria final son prácticamente nulas.