El filial se ha convertido en el máximo exponente del gol en el
grupo III. Amontona 20 goles en once jornadas y su progresión no
encuentra obstáculos. Es el Mallorca B también el equipo más joven,
porque la gran mayoría de sus futbolistas supera con dificultad la
mayoría de edad. Tierno en el DNI, el conjunto de Juan Ramón López
ha conseguido explotar un sentido de la madurez que le ha
encaramado a la quinta posición, muy cerca de las plazas de
privilegio de la competición.
El filial del siglo XXI es un conjunto confeccionado y diseñado
para formar jugadores (¿?) pero nadie oculta su deseo de acercarse
a la liguilla. López se ha encontrado un bloque que combina
elementos nuevos y piezas que derivan del descenso de categoría.
Sobresalen del curso pasado Alvaro Novo, Alyson y Da Mota (a pesar
de que apenas contó y no entró en ninguna convocatoria), mientras
Jesús, Raúl Valencia y Alvaro Cámara han tenido un inicio algo más
discreto. Sergio Granados todavía no ha debutado en la portería
mallorquinista. Alyson es el alma, la chispa y la creatividad. Eje
del balompié ofensivo del filial, el carioca se apoya en Da Mota
para dotar al equipo de presencia y gol en ataque. Entre los dos
suman diez goles ( siete del atacante). Novo es un puñal por el
carril derecho y uno de los hombres con más calidad de la
categoría. El centrocampista amontona tres tantos en Liga.
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