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EFE "Madrid
Un ligero cambio de decorado contra el Cantabria Lobos amortiguó los ecos del varapalo europeo del jueves pasado en el Real Madrid, aunque la vuelta al tajo apenas cambió nada de lo que ya se ha visto una y cien veces esta temporada en el noventa por ciento de los encuentros que juegan los madridistas.

Todo sigue igual en la parte norte de la Castellana. El baloncesto sigue fluyendo con cuentagotas en la cancha que da cobijo al cuestionado proyecto de Sergio Scariolo. Incluso un huésped en apuros como el Cantabria Lobos, instalado en los sótanos de la ACB desde comienzo de temporada, recién transformado por la imperiosa necesidad de resultados, con nuevo entrenador y cuatro refuerzos directamente extraídos de la EBA, encontró resquicios para hacer un papel digno.

El resultado es lo de menos. Las excusas por lo del Villeurbanne ya sonaron fuera de lugar. El mismo espectáculo frente a los cántabros habría incendiado los restos del naufragio europeo madridista. Aun así, los escasos dos mil espectadores que regresaron al graderío tuvieron que soportar veinte minutos del manido guión en que se han convertido los partidos del Real Madrid.

El Cantabria, a pesar de todo, sucumbió sin condiciones, pero fundamentalmente por sus propios pecados. Marc Jackson va muy pasado de kilos y, hoy por hoy, todavía es pronto para pedir a los chicos que acaban de llegar de la EBA el temple necesario para tumbar al Real Madrid en su propia casa, aunque las circunstancia sean las idóneas.

El Barcelona lo tuvo demasiado fácil para derrotar por 81 a 54 a un Canarias Telecom que se presentó en el Palau sin sus dos americanos y con Jorge Racca en el banquillo pero sin posibilidades de jugar debido a una fascitis plantar. Además, Manolo Hussein perdió a uno de sus titulares, Iván Rodríguez, a los nueve minutos debido a un esguince en el tobillo izquierdo. Los canarios aguantaron los primeros quince minutos del encuentro gracias al acierto de su pívot Rafa Vega, pero el Barcelona siempre controló el partido gracias a su acierto en el tiro exterior.