Los deportistas mallorquines disputaron ayer una de las pruebas con
más tradición del calendario atlético balear. La popular
Palma-Valldemossa, que vivió su vigésima cuarta edición, consiguió
reunir a unos doscientos atletas, cifra inferior a las esperada
desde la organización, debido en gran parte a la disputa del
campeonato balear de clubes, que tuvo lugar a lo largo del día de
ayer en el Príncipes de España.
La salida se hizo efectiva desde el centro de Palma, y tras
recorrer diversas calles de Ciutat, los deportistas enfilaron el
camino hacia Valldemossa e hicieron frente a las continuas
pendientes que conducían a la meta. El atleta del ADA Calvià
Metalnox Johny Ouriagly supo imponer su ritmo y tras distanciarse
de sus rivales en los últimos kilómetros, atravesó la línea de
llegada, después de 1.07.55 del inicio de carrera.
El segundo puesto de la popular se lo adjudicó otro ilustre del
atletismo de la Isla, Vicente Ogazón, que tras una fenomenal
carrera consiguió un tiempo de 1.08.28. Tras él, se situó Cirilo
Jiménez, compañero de los dos primeros clasificados y que se
encargó de romper el gran grupo, atacando en la subida a
Valldemossa. Pese a verse superado en el tramo final, consiguió uno
de los puestos de honor de la popular y obtuvo un tiempo de
1.08.57.
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