Luis Aragonés tiene ya claro el once que jugará el domingo ante el Real Valladolid. Foto: JOAN TORRES.

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Seis días para que el Valladolid visite Son Moix, tres bajas en la plantilla, una pretemporada, en el capítulo de amistosos, que no pasa de ser discreta y casi catorce mil socios que han sacado su abono. Este sería el resumen de la situación los días previos a que arranque el campeonato nacional de Liga. El grupo de Aragonés ha sembrado ilusión entre la afición "la respuesta de los socios es significativa" pero también levanta ciertas dudas.

La pretemporada, en el apartado de amistosos, no termina de ser el espejo en el que se puede reflejar el verdadero potencial de este equipo. Se empezó sin rodaje ante conjuntos fuertes y se acabó frente a rivales de un nivel muy inferior al del Real Mallorca. Esta es la realidad y hasta bien entrado el campeonato no se podrá valorar con mayor o menor exactitud lo que realmente puede dar de si esta plantilla.

Las bajas tampoco ayudan en nada a Luis. El de Hortaleza se queda, de inicio, sin tres hombres que están llamados a ser fundamentales en el presente campeonato. Luque y Eto'o están en los Juegos y Stankovic permanecerá un mes alejado de los terrenos de juego. A todo esto se añade la duda de saber si Miquel Soler podrá estar o no a disposición del técnico. El lateral sufre una ligera contractura en el gemelo izquierdo pero los servicios médicos confían en recuperar al futbolista de cara al primer partido de Liga.

No será por lo tanto un inicio de temporada fácil y de ahí que el entrenador rojillo de mucha importancia a los tres primeros puntos que hay en juego este domingo. No obstante Aragonés tiene muy claro hasta dónde puede llegar y, de entrada, ya no tiene ninguna duda sobre cual será el once que saltará al verde de Son Moix este domingo para enfrentarse al Real Valladolid.